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Cuando era pequeño y sabía que me graduaría en el 2020, pensaba que nunca llegaría, lo
veía como un futuro muy lejano; pero ha llegado el día de decir adiós al lugar en el que no
me podía sentir más feliz. Doy las gracias a esas dos personas que han dado todo por hacer
de mí, la persona que soy .Pa y Ma, si no fuera por la manera en la que me educaron y su
forma de ser, yo no sería el que soy, un hombre respetuoso, alegre, caballeroso y soñador,
gracias por crear una familia en la que lo principal ha sido el cariño y el amor. A Jaime y a
Nelida darles las gracias no es suficiente, se merecen el cielo, la tierra y mucho más; pero
quiero que sepan que los amo. A mis hermanas, Juliana y Carolina, por ser mis otras mamás
y enseñarme a ser un hombre íntegro, se los juro que ustedes cuatro motivan a Juan Pablo
a ser la mejor versión de mí todos los días. Agradecer a mis 4 amigos, parceros, panas:
Coco, Judaca, Bernal y Sala, ustedes son la familia que escogí, ojalá esta amistad perdure en
el tiempo y podamos contar con una vida juntos. A todos los profesores, especialmente los
que hacían que su clase fuera mucho más que una simple cátedra, por aguantarse lo vago
que era Estrada, por dar lo mejor de sí para formar una generación de líderes y personas de
bien. Al colegio San Ignacio le agradezco por no ser "un colegio más”, por hacerme sentir
orgulloso de ser ignaciano y graduarme, por formarme como dice el lema "SER MÁS PARA
SERVIR MEJOR”. Me di cuenta de que en el colegio lo menos importante es el estudio, me
motivaba levantarme todas las mañanas sabiendo que me iba a reír todo el día, porque eso
es lo que va a quedar en el recuerdo, me pongo a pensar y me da risa toda la lidia que di,
recuerdos como jugar chucha zombie, todos los partidos de fútbol, hacer los arcos con
morrales, los mundialitos, la clase de educación física, apostar láminas del mundial, hacer
guerra de comida en el almuerzo, capar clase, ir a San Pedro, ir a "estudiar" a la casa de un
amigo, quedarse vagando en extraclases, las fiestas, las salidas, pijamadas, lo poco que
lastimosamente alcanzamos a vivir de 11, en fin, me podría gastar todo este texto hablando
de recuerdos que me quedaron del colegio y de las personas que fueron parte de este
hermoso trayecto en mi vida. Señores, aquí fue.