Page 14 - cuentoflip

Rocío abrió la caja y dentro encontró un sobre. Lo abrió y leyó el
mensaje que había escrito en una hoja, para que los niños lo es-
cucharan:
“Soy guardiana de un “gran tesoro” que solo tendrás si los enig-
mas que he dejado ocultos en la casa sabes encontrar. El que per-
siga este fin, rico no se hará, pero más cerca estará de la felicidad.

Ainara, 1935”.
—Parece que esto lo dejó aquí la antigua dueña —reconoció la
restauradora—. Es una especie de juego. Quienes la conocieron
comentaban que le gustaba hacer estos juegos para sus familiares
y amigos.
—Rocío, ¿podemos buscarlo nosotros? —dijo Kira con entusias-
mo. Y los ojos le brillaron más que el nombre.
—Quizá deberías preguntarle eso a tu padre. La casa está en bue-
nas condiciones y no creo que os ponga ningún inconvenien-
te. Pero no olvidéis que estamos de obras y hay ciertos peligros.
Eso sí, si os da permiso, me tendréis que mantener informada de
vuestros hallazgos para poder documentarlo —dijo con una son-
risa socarrona.
—¡Jairo, tenemos una nueva misión! —gritó la niña—. Te lo dije.
¡Nuestro proyecto!
Jairo, que rascaba con fuerza el lomo a Bruno, la miró con indo-
lencia.
—Si no queda más remedio... —la voz sonó resignada.
—Vamos, Jairo, busquemos a mi padre. Ainara dejó ocultos estos
secretos para que nosotros los encontráramos. ¿No te das cuenta?
Rocío vio cómo los niños salían se perdían entre las calles, mien-
tras Bruno los seguía sin dejar de olfatear un milímetro del suelo
por el que pasaba.