Page 325 - La introduccion de la Segunda Venida de Cristo a Su Iglesia.indb
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La Visión de La Carpa   319

               PASTOR DEL REDIL
               3 de abril de 1956 [56-0403]
               Chicago, Illinois, Estados Unidos
               Rev. William Marrion Branham
                   [Párrs. 15-18, 28 incluidos en Citas, pág. 13, párr. 100]
                   15  Uno de estos días que quiero armar esa carpa que el Señor me va a dar, en las afueras de este
               lado de Chicago aquí en alguna parte, y tener una reunión de alrededor de seis u ocho semanas.
               Nos vamos a ir directamente a lo largo de la Biblia y enseñar sobre esas cosas. Y usar de la
               sanidad divina solamente como una o dos veces por semana, o algo así. Y sólo enseñar la Biblia.
                   Ahora estas cosas no son místicas. Estoy en contacto con el Espíritu Santo, yo soy una persona
               analfabeta. Eso es verdad. En mí no hay nada. Pero cuando yo estoy bajo Su unción, y Él me lleva
               fuera y me enseña cosas, entonces tengo la confianza perfecta de que está exactamente correcto,
               porque nunca ha fallado. Y Él nunca dirá una cosa fuera de lo que está escrito en esta Biblia. Eso
               es correcto. Y ustedes vigílenlo. A través de los años, Él nunca dijo una cosa en ningún tiempo, a
               menos que fuera absolutamente escritural, basada en la Biblia. ASÍ DICE EL SEÑOR.
                   16  Hace algunas noches, llegué desde allí (algunos meses atrás, más bien) de la reunión. Yo
               estaba descorazonado en California. Y yo… Mis reuniones habían fallado terriblemente. Y yo le
               había prometido al Señor que si alguna vez Él me fallaba… Cuando comencé en las campañas,
               yo sabía que había dos o tres cosas de las cuales el ministro debe de guardarse, y una de ellas es
               el dinero. Así que el dinero, la popularidad, las mujeres, y lo demás… Así que yo hice un voto a
               Dios. Yo encontré que Sansón cayó por causa de Dalila, la mujer. Y encontré que Saúl cayó por
               causa de la soberbia. Y Balaam cayó por causa del dinero. Y todas esas cosas son escritas para
               nuestro ejemplo, dice el libro de Hebreos. Y nosotros observamos estas cosas y mantenemos la
               cobertura de la Sangre entre nosotros y esas cosas.
                   Al proseguir, yo dije: “Ahora, Señor, yo sé que habrá mucho dinero envuelto en esto, pero
               desnudo entré a este mundo y desnudo retornaré (¿ven?), y Tú ayúdame”. Y por la gracia de Dios
               ha sido maravilloso. Y así que yo dije: “Si alguna vez me fallas, de modo que tenga que rogar por
               dinero o poner énfasis en las ofrendas, yo dejaré las campañas”. Y lo hice cuando fallé con quince
               mil dólares en California. Y el…
                   17  Yo llegué a mi hogar, y la mañana siguiente Él me apareció en una visión, y me dijo
               así como ustedes han leído. Sólo observen cómo eso aconteció. Yo no sabía que eran niños
               mexicanos que venían caminando hacia abajo, como han leído en la visión. Yo dije que sólo eran
               niños morenos. Se suponía que yo fuera a Arizona durante ese tiempo y armara una carpa. Y allí
               yo iba a tener –en la visión– este lugar pequeño en el lado, justamente como Él me había dicho y
               cómo hacerlo, donde yo no estaría en la presencia de la gente. Ustedes… El micrófono saliendo
               hacia afuera, hablando de todo ello. Él dijo: “Esto no será imitado”. Así entonces, cuando ello se
               estableciera al lado. Pero entonces ustedes podrían oírlo… Pero la gente es la que opera ese don.
               No soy yo. Yo no tengo nada que ver con ello. Es sólo someterme y ustedes mismos hacen la
               operación de ello. La fe de ustedes es lo que lo hace. Y allí es donde entonces, cuando toda la fe
               comienza a venir…, ahora ustedes sólo se pueden imaginar lo que les hace a ustedes. Y yo solo
               puedo quedarme por unos pocos. Pero cuando lo tenga fijo y arreglado en esa manera, yo podré
               tomar cientos tras cientos de ellos cada noche. Y el Señor hará lo excesivamente abundante.
               Ustedes sólo anoten eso. Y yo pensé: “Comenzarlo en Phoenix, está muy bien”.
                   18  Y entonces ocurrió, cerca del tiempo en que yo iba a Phoenix, que el hermano Allen se
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