Page 46 - Libro para Angi
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SAL TO DE AMOA POR LA VIDA
hoy, Tony, pierdes tu cita y nos vemos hasta la semana siguiente. Y si
vas a es tar faltando, es mejor que ya no vengas. Si no estas comprome-
tida dejalo".
i_, Como que no estaba comprometida? A pesar de todos los obs-
taculos que habfa en mi camino, vefa c6mo pero asistfa a mi horn
semanal con Marcela.
No podrfa explicar exactamente que fue lo que me pas6 con ella
porque es algo que llevo muy dentro de mf. .. tanto, que no puedo verlo
objetivamente. Una no sabe c6mo naci6 pero sabe que naci6. Una no
sabe c6mo aprendi6 a caminar, pero sabe que lo hizo. Asf me pas6 con
Marcela. Con ella mi vida se transform6. Mi alma, silenciosamente,
rompi6 el capullo en que se encontraba presa, y despleg6 sus alas para
encontrar el sentido a la vida. Con Marcela di el salto mas importante
de mi vida. No tuve que subirme al avi6n ni tampoco llevar paracaf das
y sin embargo, ha sido el salto mas hermoso, el mas valioso, el mas
significativo: el salto de amor por la vida. Nadie me condecor6, nadie
me aplaudi6 y sin embargo, mi alma se ha complacido y nutrido a traves
de el.
El no poder caminar, correr, bailar, brincar, que tanto dolor me
habfa causado perdi6 mucha de su carga al experimentar el movimiento
intemo que yo misma podfa generar. De pronto me vi a mf misma
moviendome de una manera impresionante. Y por segunda ocasi6n, mi
vida dio un giro de ciento ochenta grados.
Alguna vez me han preguntado: "i_, Quien es Marcela en tu vida ?"
Me llena de emoci6n reconocer lo importante que es en mi existencia.
Fue y es el hombro en el que pude derramar todas mis lagrimas y
sentirme acompafiada y consolada; el ofdo atento y amoroso que
escuchaba con paciencia mis angustias, miedos, tristezas, dolores y la
mano firme de la cual me asf con fuerza para poco a poco ir saliendo de!
agujero oscuro y desolado en el que estaba. Ha sido una mirada cierta
que me vio con empatfa, comprensi6n y temura; una voz que me alent6
a continuar diciendome: "Tu puedes". Marcela fue la compafifa mas
duke que pude haber tenido en el camino terapeutico.
Marcela conmigo recorri6 mi vida y me dej6 ser yo, sin crfticas,
sin peros, sin limitaciones. Por primera vez tuve el espacio necesario
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