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GCF NEWS 87
Ahora bien, en lo personal no estoy de acuerdo con
muchos de los aspectos por los cuales se le juzga. Son
muchos los escritores que le critican, entre estos
encontramos al autor colombiano Héctor Abad Faciolince,
quien publicó un artículo, titulado Por qué es tan malo
Paulo Coelho en el que reprocha, principalmente, la
estructura simplista, ya mencionada, de la mayor parte de
la producción literaria de Coelho, comparándola con las
estructuras descritas en el estudio sobre las formas
canónicas del cuento infantil llevado a cabo por Vladimir
Propp. Además, señala con sátiras la falta de profundidad,
el poco contenido “valioso” de los textos y la tendencia de
Coelho a hacer escritos de auto ayuda y superación
personal. Textos que para muchos, están lejos de ser
literatura. Pero ahora bien, yo me pregunto, ¿si realmente
estos textos son tan malos, literariamente hablando, por
qué a la gente le ha gustado tanto? Ya Faciolince groso
modo explicaba que quizá “esto se debe precisamente a
que sus libros son tontos y elementales. Si fueran libros
profundos, complejos literariamente, con ideas serias y
bien elaboradas, el público no los compraría porque las
masas tienden a ser incultas y a tener muy mal gusto”. De
cierta forma algo de razón hay en estas palabras. Pero
ojo, no estoy diciendo que esta sea la respuesta. Por mi
parte no soy muy fanática de Coelho, de hecho solo me
baso en algunas columnas que he leído para dar mi
humilde opinión. No obstante, con lo poco que he leído me
ha bastado para entender que este autor más allá de
cumplir con los requerimientos de los expertos o de
quienes le critican, busca darle al lector un espacio en
donde este pueda salir de su cotidianidad. Quizá sí utilice
Una partícula positiva que aunque parezca
muchas palabras bonitas para referirse a algo sumamente
pequeña e insignificante, puede llegar a ser lo
común, pero, es justo eso lo que le otorga al lector la
suficientemente grande como para cambiar la
facilidad de ir más allá de lo que a simple vista se
vida o el pensamiento de alguien. Porque, para
entiende, le brinda la oportunidad de ser un niño y
gustos se hicieron los colores, en este caso los
encontrar en algo tan simple un universo de posibilidades.
escritores. En definitiva, no podemos afirmar
Le da un escape.
que tan bueno o malo puede ser el trabajo de
un escritor. No se puede asegurar algo, desde
En la columna El acto de escribir: el lector, de el periódico
lo que nos parece o no estar bien. Porque para
colombiano El Espectador, Coelho menciona una frase de
este caso en particular, siempre y cuando haya
Brian Aldiss, que dice: “Hay dos tipos de escritores: unos
un lector disponible a conectarse con las
hacen pensar, y otros hacen soñar”, a mi parecer este
palabras del literato, sin importar que tan
último es al cual pertenece Coelho. Un escritor que fuera
estructurado gramaticalmente esté el texto, o
de sus logros, reconocimientos, sus críticas y su
que tanta variedad de términos se utilicen en el
“insuficiente forma de hacer literatura”, pretende cautivar
mismo; si hay solo una persona a quien le sirva,
a los lectores con historias que no se alejan mucho de la
le ayude, le interese, lo entienda y sobre todo lo
realidad, con relatos un tanto pintorescos o dramáticos
comprenda. Solo en este caso, habrá valido la
pero que siempre, al final, deja algo en qué reflexionar.
pena el trabajo del autor.