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Ésta es mi versión de lo que se ha dado en llamar «paradoja de Russell»,
                     Esta historia tiene un epílogo. El jueves, conducen al jugador para que
        e! jueves, yo sabría que ese día habría de morir, y por tanto no sería una sor·
                       se le ejecute. Y está muy sorprendido. De modo que las órdenes del juez ter-
              El juez se rascó la cabeza mientras se llevaban de nuevo a su celda al ju-
          presa.  En consecuencia, queda eliminado e!  jueves. Con el  mismo razona-
            miento, podemos eliminar e! miércoles, e! martes, e! lunes y e! día de hoy.
                          minan por cumplirse a plena satisfacción.
                 gador, seguro de sí mismo.
        libro fundacional que reformu16 las matemáticas sobre la base de la nueva
             teoría de conjuntos sentó las bases para el desarrollo posterior de la  teoría
                              tipo  era  e!  en homenaje a Bertrand Russell, que fue tal vez la última persona en alcan-  Si analizamos la  zar grandes logros tanto en matemáticas como en filos~fía.  historia, vemos que las condiciones que e! juez ha puesto dan como resulta- do que ningún día se ajusta a ellas, porque, como señala con tanta astucia el  prisionero, en ninguno de ellos la ejecución 'sería una sorpresa. Pero la con- clusió
                 adelante). He aquí mi versión de la  «paradoja de Russell», que estimuló e!
               informática  de Turing,  basada en la  máquina de Turing (véase nota, más
          concepción de la teoría de conjuntos de Russell. El avance de Russell en la
                            toria, también tiene algo de lógico. Pero esta vez se ha equivocado de indi-
                        Antes de terminar en «e! Otro Sitio», nuestro amigo e! jugador había vi-
                          vido una vida dura. Era impaciente y no le gustaba perder. En nuestra his-
                              ¡Si  hubiera  sabido  que  el  Conocido por su severidad, e! magistrado está furioso y desea emitir la  sentencia más grave que se pueda concebir. De esta manera, le dice al juga- dor que no sólo está condenado a morir, sino que la sentencia ha de cum- -Ante todo, te liquidaremos rápidamente, de la misma manera que tú  has hecho con la víctima -dice  e! juez-o Este castigo no debe hacerse dec- tivo después




                   descubrimiento de Russell:   que  tenía  que  despachar.  viduo  al   sobrino del juez!   plirse de una manera original.   mos a buscarte por sorpresa.   no rendrás la seguridad de que ese día habrás de morir.  cumpla, no me puede ejecutar e! sábado.   -¿Por qué?   ljue me ejecutará ese día, y no sería una sorpresa.  sigo sin entender por qué te sientes aliviado.   co me puede ejecutar en viernes.  -¿Por qué? -pregunt
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