Page 1969 - JULIO
P. 1969

Te cielo siempre y te guardo aquí en mi corazón como mi tesoro más
                                                                                                              8
                  preciado.


                  Extrañarte ya se me hace un modo de vivir, un modo de sentir este amor,
                  nadie dijo que fuese fácil, más para mí cualquier sacrificio es pequeño


                  frente al gran amor que me regalas cada vez que te veo, ¡te cielo tanto!,

                  ¿Lo sabes verdad?

                  Y de estar aquí escribiendo y extrañando, sé que te cielo, y más que nada
                  en el mundo mi sueño es abrazarte hasta quedarme dormido en tus brazos

                  esperando el nuevo día para volver a luchar por este amor.

                  Tu corazón está asegurado conmigo, y el mío contigo, lo sé porque sólo

                  tú tienes la llave para llegar hasta mí.

                  Sólo tú sabes cómo siento, como cielo... sólo tú, nunca otro, sólo tú mi
                  amor, ya viene un nuevo amanecer, ese que cada día me acerca más a ti.


                  Espérame amor mío, que ya pronto estaré junto a ti.

                  Tus labios me inspiran


                  Suaves como el algodón y delicados como los de una diosa de marfil,
                  como un ente alado que pudiera quebrarse en cualquier momento al más

                  leve contacto.

                  Besarte es como recibir un soplo de aire fresco en una calurosa y soleada

                  mañana de verano, como despertarte justo a tiempo para ver amanecer,
                  como un cuento de hadas sin final, una utopía permanente en la que no

                  puedo ni quiero sino dejarme llevar libremente y que todo suceda por su
                  propio peso.


                  El tacto de tus labios inspira en mis sentimientos encontrados como una
                  locomotora a punto de estrellarse a toda velocidad, porque la enorme
                  felicidad que invade mi ser choca con el miedo a perderte un día, a que te

                  vayas  de  mi  lado  o  que  el  destino,  la  vida  o  las  circunstancias  acaben
                  destruyendo lo que tenemos, algo precioso y perfecto.


                  Puede  que  no  sea  hoy  ni  mañana,  pero  algún  día  seré  capaz  de
                  demostrarte, aunque solo sea lejanamente lo muchísimo que significas
   1964   1965   1966   1967   1968   1969   1970   1971   1972   1973   1974