Page 1964 - JULIO
P. 1964

Tú eres mi maravillosa inspiración                                            3

                  Es  preciso  el  momento  para  volcar  mis  sentimientos  en  este  humilde

                  papel, donde lo mágico se haga eterno, celebrando este bello día que me
                  llena de felicidad, pues ver tu carita risueña me produce alegría y bondad,

                  y verte tan lozana en esta vida, te hace dueña de la juventud y de mi

                  amistad.

                  Eres la primavera que le da dulzura a estos versos, eres la mujer cuyas
                  manos tienen la delicadeza para aliviar mis tristezas, y las mías poseen el

                  amor  que  necesitas  para  endulzar  tus  proezas,  haciendo  del  paisaje  el
                  lienzo más hermoso reflejando tu belleza.


                  He recorrido mil distancias, pero ningún camino es tan bello como ir de
                  tu mano, he tropezado mil veces, pero ahí has estado siempre tú, cuando
                  gritaba de dolor, fuiste un apoyo constante…por esto doy testimonio de

                  fe y amor como humilde escribano, de este sentimiento lindo que me
                  embarga, expresándote mi cariño con mis propias manos.


                  Comienzo a rimar la historia del por qué eres el amor de mi vida, la maga
                  que  hechizo  de  encanto  mi  mundo,  haciendo  de  éste  un  paraíso,

                  convirtiéndome en tu títere cada vez que sientes que por tus manos me
                  deslizo, sintiéndote ahora sí seguro que nunca pronunciaré una despedida.


                  Hablar de ti es incansable, pues tú eres mi inspiración, tú le das alegría al
                  ser que yo vivo, tú eres un encanto y divinidad mujer, tú me provocas, me

                  emocionas, haces nacer en mí la pasión, cada vez bajo mis sabanas cuando
                  tu olor percibo, sumergiéndonos en la fuente de vida y placer.


                  He de terminar estos humildes versos, sellando en ellos mi más grande
                  ilusión, ven camina siempre junto a mí, te lo pido de favor, bajo esta

                  estrella hermosa que nos invita a llegar juntos hasta nuestro redentor,
                  implorando siempre por este lindo sentimiento tras una sencilla oración.


                  Amor, acompáñame, que Dios está dispuesto hacer maravilloso nuestro
                  destino, acompáñame a envejecer, a cuidar a nuestros hijos…, sé siempre
                  tú a la que ame fielmente mi corazón, y se tú la que, en un sarcófago,

                  algún día me estés enterrando.
   1959   1960   1961   1962   1963   1964   1965   1966   1967   1968   1969