Page 157 - Los siete sabios de Grecia, en sus siete veneradas sentencias

Je '"precia. 133
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le obligaba a executar lo contrario
de lo que obraba; y un dia miran
dolé un grande Astrólogo, que no
le conocía, observando los espacios
de su cara , y su figura natural , se
pasmó de admirado, y dixo: Sin^
duda es este el hombre más malva-
do , pue hoy vive.
Apenas se pudieron contefier sus
discípulos contra aquel caluirunoso
pronóstico; pero les detuvo vSocra-
tes respondiendo : El tiene razón,
,
tal es mi natural ; pero con la Filo-
sofía le he vencido; porque qual-
quiera (por vicioso que sea) como
llegue a conocerse por tal , desecha-
rá la maldad del vicio , y obrará vir-
tuosamente con este conocimiento,
porque no nace de otra raíz el ha-
bito vicioso, qu'e d^ una ignorancia
del bien , ó de un olvido del pro-
prio conocimiento.
Quien, sino el proprio conoci-
miento hizo huir los honores al Cy«
•prio-