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Los Festivales de la Canción Religiosa Juvenil

Por: Lady Chicoma de Tuesta

an pasado casi 40 años, desde el mes de julio ras de la mañana:
del año 1972, en que guiado por ese amor y • En el salón parroquial, un grupo volcando toda su crea-
entrega a la juventud, nuestro Párroco Funda- tividad e ingenio para arreglar el escenario con los po-
Hdor Monseñor Juan Tomis Stack con un grupo cos recursos que se podía contar: luces, cortinas, flores
reducido pero entusiastas de jóvenes, dio nacimiento a y papel (todo prestado u obsequiado), iban dando forma
ese evento que a lo largo de sus 19 ediciones se fructifica- al recinto que por la noche acogería a los grupos partici-
ría en la composición de más de 500 canciones llenas de pantes.
amor y de alabanza a Dios : El 1er. Festival de la Canción • En las calles, otro grupo, preocupado en asegurar el
Religiosa Juvenil. equipo de sonido, los premios, la asistencia de los jura-
dos y los detalles finales.
Muchos fueron los jóvenes que tuvimos la bendición • En la secretaría, la labor incansable de las secretarias
de participar de esta experiencia desde su organización, Carmencita y Srta. Consuelo en el tipeado, mimeografia-
dando todo nuestro tiempo y esfuerzo al desarrollo de do y compaginación de los cancioneros.
ese apostolado: de unir a la juventud con Dios a través
del canto. La noche llegaba sin dar cabida al hambre ni al cansancio,
y allí estaban nuevamente los jóvenes para dar la bien-
El mes de Setiembre, mes de la juventud, fue el esco- venida a los participantes y público que llenaba el Salón
gido por nuestro Padre Juan para trabajar en el Festival Parroquial ya de luces y color para dar inicio al Festival.
y ya desde un mes antes los ajetreos de la organización
llenaban los ambientes de la secretaría y el salón parro- Los ajetreos detrás de escenario continuaban, con las co-
quial, redactando las bases, las invitaciones y los oficios ordinaciones en la mesa de control y de los jurados; con
de colaboración a tanta gente que con cariño respondía el nerviosismo de los animadores y los encargados del
a nuestros pedidos. Recorrer muchas veces a pie los co- orden de los participantes.
legios, parroquias, universidades, clubes e instituciones,
no agotaban las energías de las comisiones encargadas Las presentaciones de los grupos se iban dando uno a
de motivar la participación de los diferentes grupos, lle- uno acompañados de la algarabía y bullicio de las barras,
vando oficios, afiches y boletos para la noche del Festival. llenando de alegría y emoción el ambiente, hasta llegar a
los momentos finales de la proclamación de las cancio-
A medida que se acercaba el día del Festival, las tensio- nes ganadoras.
nes y preocupación por alcanzar el éxito del evento aso-
maban en cada una de las reuniones de coordinación, La fiesta había terminado pasada la media noche y allí
pero siempre estaba nuestro director y guía Padre Juan estaban nuevamente los jóvenes para volver a dejar todo
para alentarnos y renovar nuestro entusiasmo. en orden: abajo el escenario, luces y letras, de vuelta a la
capilla las bancas prestadas y todo dispuesto para la misa
El día del Festival la fiesta se vivía desde las primeras ho- del día siguiente a las 7 de la mañana.
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