Page 20 - revista juan tomis
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mos del Hospital Las Mercedes que generalmente no   nos acompañaba nuestro asesor espiritual o cualquier
              tenían quién los visite. Allí cantábamos, les leíamos el   otro  sacerdote  disponible.  Él  aprovechaba  esos  días
              Evangelio del domingo y algunas veces les llevábamos   para darnos charlas de formación, consejos y también
              frutas. Por si esto fuera poco, en la noche asistíamos a   era oportunidad para confesarnos.
              la misa de la juventud que era nuestra misa.
              De sólo recordarlo ya me siento cansada, pero en ese   Por ese mismo tiempo, el P. Juan tuvo la brillante idea
              tiempo era el entusiasmo por hacer algo útil por los   de pedirnos organizar el “Primer Festival de Canciones
              demás y el compartir con los amigos lo que nos daba la   Religiosas Juveniles” al que le siguieron muchos más,
              energía para hacer lo que hacíamos. Básicamente era   porque vio que dentro de la juventud de su parroquia
              el amor de Dios lo que nos mantenía unidos.      había mucho talento por descubrir y explotar. Él decía
                                                               que sería mejor cantar en las misas canciones que fue-
              ¿Qué decían nuestros padres? Creo que todos coinci-  ran compuestas por los mismos jóvenes.
              dían en que se sentían confiados de que estábamos
              en un buen lugar, haciendo cosas sanas, alejados de   Por motivos de salud, nuestro querido P. Carlos Purón
              vicios y malas compañías. Por supuesto que eso no nos   se regresó a España y para ese entonces llegó a la pa-
              eximía de las tareas que teníamos que hacer en casa   rroquia desde USA, el P. Alfredo Bietighofer (Q.E.P.D)
              antes de salir                                   quien con su sonrisa bonachona ganó el corazón de
              Cuando  M.  Luigi  tuvo  que  irse  de  Chiclayo,  el  que   muchos jóvenes. Él tomó las riendas de la dirección
              tomó la dirección del grupo fue el P. Carlos Purón S.J.   del JIC y aunque sólo estuvo tres años, dejó una huella
              (Q.E.P.D.), quien con su dinamismo inyectó en el gru-  imborrable.
              po  el  deseo
              de  enfrentar                                                                     Estoy  segura
              nuevos  retos                                                                     que  hay  mu-
              y   descubrir                                                                     chas    otras
              los   talentos                                                                    cosas  que  se
              con  que  Dios                                                                    hicieron  des-
              nos  había  do-                                                                   pués  que  salí
              tado.  Con  él                                                                    del  grupo  y
              realizamos  y                                                                     que  merece-
              pusimos   en                                                                      rían  ser  men-
              escena   dos                                                                      cionadas, pero
              obras  teatra-                                                                    creo  que  con
              les:  “La  Barca                                                                  estos  recuer-
              sin  Pescador”                                                                    dos,  le  damos
              y    “El  Médico                                                                  al  lector,  ya
              a Palos”. Unos                                                                    sea  un  adul-
              eran  los  ac-                                                                    to o un joven,
              tores  y  otros                                                                   una idea de lo
              ayudaban  en                                                                      que  significó
              conseguir  el                                                                     para  nosotros
              vestuario y arreglar el escenario que no le envidiaba a   el haber vivido bajo la guía de un hombre preocupado
              la mejor de las compañías de teatro.             por el bienestar material y espiritual de sus feligreses,
                                                               como el “Buen Pastor” al que se hace referencia en la
              En  ese  tiempo  también  empezamos  con  los  campa-  Escritura: “Yo soy el Buen Pastor: conozco a las mías y
              mentos anuales de verano donde pasamos unos boni-  las mías me conocen. Yo doy mi vida por mis ovejas”
              tos días de sana diversión y entretenimiento. Además   Juan 10,14-15. El P. Juan como buen pastor, donó su
              de dormir en el suelo, teníamos que ingeniarnos para   vida por sus ovejas con caridad pastoral, con humilde
                                                 cocinar  con   espíritu de servicio, compasión, paciencia y fortaleza.
                                                 el   mínimo
                                                 de  comodi-   Nos  consideramos  muy  bendecidos  y  afortunados
                                                 dades  (¡Gra-  de  haber  tenido  una  juventud  vivida  plenamente
                                                 cias  a  Dios   y que ahora gracias a las enseñanzas de todos los
                                                 que  nunca    que nos guiaron en esos años difíciles de juventud,
                                                 tuvimos  una   podemos decir que somos personas de bien. Nues-
                                                 emergencia    tro homenaje de agradecimiento debe ser nuestro
                                                 por   intoxi-  compromiso de continuar trabajando para engran-
                                                 cación!).  A   decer el reino de Dios en la tierra y hacer el mundo
                                                 estos  cam-   de las nuevas generaciones, un lugar digno donde
                                                 p a m e n t o s   reine la paz y la justicia.

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