Page 139 - Casados o Cansados
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Hablando de la mentira, cuentan que una vez cuatro soldados llegaron tarde a la base, el capitán muy enojado
metió en su oficina al primero y le pidió explicaciones de por qué llegó tarde: – “mi capitán, salí muy temprano de la casa
pidiendo quien me lleve y pasó un viejito con una carreta y caballo y accedió a traerme, mi capitán, usted sabe, carreta y
caballo hasta que llegan…” – “De acuerdo, quedas libre”. Al salir le sopló a los amigos que estaban afuera, dijeran las
palabras “carreta y caballo” como consigna para salir libres. Entró el segundo soldado y argumentó que salió temprano con su
carro, el cual se accidentó y no tuvo otro remedio que tomar la carreta y el caballo de su padre –“mi capitán, tu sabe, carreta y
caballo hasta que llegan…,” el tercero argumentó algo parecido y agregó: -“mi capitán, “carreta y caballo hasta que llegan....”
Cuando entró el cuarto soldado, el capitán ya estaba muy bravo y le gritó: -“¿tú también viniste con carreta y caballo?” – “no
mi capitán, yo salí temprano con mi Ferrari” – “entonces ¿por qué llegaste tarde?”-“mi capitán, con tantas carretas y caballos
en el camino no podía pasar”.
Si observamos, veremos que en el Pueblo Judío existió una
famosa Juez en la época de los Jueces que se llamaba “Deborah
HaNevia” (la Profetisa Deborah) y el motivo por el que se aceptaron
sus juicios fue porque juzgaba solamente en base a las profecías, a
través de las cuales D-os le señalaba quién era culpable y quién
inocente.
Así que decirles a las mujeres que no pueden ser jueces, no es
ofensa ni una decisión discriminatoria sino más bien un elogio por ser
tan puras, nobles y rectas.
3 . Pureza e impureza
Para comprender por qué la mujer lleva implícita la condición de
impureza en ciertos días del mes, necesitamos saber una regla muy
importante que es la siguiente: la impureza la tiene solamente quien
tiene pureza y a medida que la pureza es mayor, mayor será su
impureza.
Dentro del Judaísmo no todos llegan al mismo grado y frecuencia de
impureza, todo dependerá de qué tan alto nivel de pureza puedan alcanzar. Un
ejemplo claro de ello eran los sacerdotes, quienes al ser personas muy santas en el
pueblo de Israel y dada la importancia de servir en el Templo, lograban niveles de
pureza superiores, por lo tanto, tenían también muchas leyes de impureza y con
mucha facilidad se impurificaban teniendo que pasar por un proceso de purificación
muy amplio y complicado.