Page 57 - Camino a la victoria
P. 57
Camino a la Victoria
Juan 9:35-38 (Lee en voz alta) «Oyó Jesús que le habían expulsado; y hallándole, le dijo:
¿Crees tú en el Hijo de Dios? Respondió él y dijo: ¿Quién es, Señor? para que crea en él. Le
dijo Jesús; Pues le has visto, y el que habla contigo, él es. Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró.»
Este incidente involucra a un hombre que era ciego de nacimiento. La gente pensaba que
estaba ciego por alguna clase de pecado cometido por sus padres o él mismo. Pero Jesús
dijo, NO. Este hombre está ciego porque Dios quiere manifestar su poder y gloria. La gente
no entendía muy bien. Así, Jesús sanó al ciego. Esto provocó una confusión. Finalmente,
cuando los líderes religiosos no consiguieron saber lo que querían de los padres del ciego
para poder desacreditar a Jesús, lo expulsaron. El hombre feliz, pero aturdido, viene a
Jesús. El Señor con compasión, le pregunta «¿Crees tú en el Hijo de Dios?» Al principio el
hombre no comprendió bien la pregunta. Entonces Jesús le explica más ampliamente.
Entonces el hombre exclama, «¡Creo Señor!». ¿Qué creía él? Que Jesús es el Hijo de Dios.
¿Qué hizo después? Adoró a Jesús.
¡La fe no termina con creer!
Nosotros comenzamos esta sección con la historia de un campesino. Él sabe que cuando
llega la primavera, es el tiempo de prepararse para plantar, porque eso es lo correcto. Él
sabe, va al mercado a comprar las semillas para plantarlas, porque cree en la lluvia que
caerá para nutrir su siembra. Pero, imaginémonos que el campesino regresa del mercado
con una gran bolsa llena de semillas, y las almacena en algún lugar. La nieve se ha
derretido. La tierra se encuentra suave para poder recibir la semilla. El viento es cálido y el
sol brilla intensamente. Pero el campesino no va al campo a sembrar. Sólo se sienta en
una silla de su casa y clava su mirada en la bolsa que contiene las semillas.
¿Qué sucede?
También hablamos un poco acerca del llanto de un niño y su madre alimentándolo. ¿qué
pasaría si el bebé se negara a tomar el pecho de su mamá y siguiera llorando? ¿Cuál sería la
posible razón para ese comportamiento tan extraño?
www.cruzadamexicana.org Página 57