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Lunes 10 Diciembre 2018

vagarán por él; no habrá allí ningún SALMO
león ni penetrarán en él las fieras sal- Sal 84, 9ab y 10. 11-12. 13-14
vajes. Por allí caminarán los redimidos, (R.: Is 35, 4d)
volverán los rescatados por el Señor; y
entrarán en Sión con gritos de júbilo, R. Ahí está nuestro Dios, viene a
coronados de una alegría perpetua: los salvarnos.
acompañarán el gozo y la alegría, la
tristeza y los gemidos se alejarán. Voy a proclamar lo que dice el Se-
ñor: el Señor promete la paz, la paz
Palabra de Dios. para su pueblo y sus amigos. Su salva-
ción está muy cerca de sus fieles, y la
Gloria habitará en nuestra tierra. R.
COMENTARIO
El profeta habla con entusiasmo El Amor y la Verdad se encontra-
sobre la felicidad de los tiempos rán, la Justicia y la Paz se abrazarán; la
mesiánicos. Con la llegada del Verdad brotará de la tierra y la Justicia
Mesías todo quedará transforma- mirará desde el cielo. R.
do: La tierra árida reverdecerá, El mismo Señor nos dará sus bienes
brotarán aguas en el desierto, y nuestra tierra producirá sus frutos. La
los ojos del ciego se abrirán… Justicia irá delante de él, y la Paz, sobre
todo será maravilloso cuando la huella de sus pasos. R.
JHWH envíe el Mesías a la tierra.
Nos estamos preparando un año ALELUIA
más para celebrar la Navidad,
Dios que nace; el Mesías viene Aleluia.
y, en cada uno de nosotros, de- Vendrá el Rey, Señor de la tierra, y
ben producirse las maravillas que quitará el yugo de nuestro cau tiverio.
Isaías canta para este tiempo. El Aleluia.
Reino de Dios está en nosotros,
en él todo es paz y alegría, Cristo EVANGELIO
viene a llenarnos de su gracia. Evan ge lio de nues tro Señor Jesu cris to
Nosotros, con su fuerza, tenemos se gún san Lucas 5, 17-26
que hacer realidad la paz y la Un día, mientras Jesús enseñaba,
alegría de ese Reino que ya está había entre los presentes algunos fari-
entre nosotros, aunque… todavía seos y doctores de la Ley, llegados de
no. Tal vez falta la parte que a mi todas las regiones de Galilea, de Judea
me toca. Él cuenta con nosotros, y de Jerusalén. La fuerza del Señor le
que cada uno haga su tarea, con daba poder para curar. Llegaron en-
Cristo, no nos faltará la gracia, tonces unas personas transportando a
respeta nuestra libertad para que una paralítico sobre una camilla y bus-
actuemos de tal forma que el rei- caban el modo de entrar, para llevarlo
no se haga realidad palpable en ante Je sús. Como no sabían por dónde
todos los rincones del mundo, introducirlo a causa de la multitud, su-
empezando por nuestro entorno. bieron a la terraza y, desde el techo, lo
Vivamos la paz y seamos mensa- bajaron con su camilla en medio de la
32 jeros de su paz. concurrencia y lo pusieron delante de
Jesús.