Page 69 - LIBRO LA NCHE TRAGICA SANTACRUZ
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La trágica noche de Santacruz                            59



            hombre conocido y reconocido por su tenacidad y sacrificio de comer-
            cializar goma desde el Bajo Paraguá hasta la mercados nacionales e in-
            ternacionales por los ríos Madeira y Amazonas hasta el océano Atlántico.
            Otros conocidos rescatadores de goma de la provincia Vaca Díez eran
            Romelio Salinas, Ramón Párraga, Ovidio Suárez y un siringuero apodado
            “Papazote”, todos eran propietarios de gomales y, por lo tanto productores
            de goma, cada uno tenía su barraca donde acopiaban las bolachas de goma
            a orillas del río Benicito.

             Con el pasar de los años Anastasio Santacruz fue considerado el millo-
            nario más conocido y reconocido de la región, nadie sabía que él ahorraba
            dinero para solventar una larga campaña política de su hijo para las elec-
            ciones presidenciales de 1997; Anastasio se dio cuenta que existen en el
            país regiones olvidadas que merecían ser tomadas en cuenta, por eso su
            hijo, Euclides, se embarcaría en una misión casi imposible, gobernar
            desde el Palacio Presidencial de La Paz. “El Napolitano” era solamente
            su mano derecha.

            Tiempo después, el comercio de los ponchos y los maleteros decayó de-
            bido al contrabando de comerciantes inescrupulosos, quienes adquirían
            en Brasil ponchos y maleteros de contrabando y a menor precio, lo que
            ocasionó la casi quiebra total de la “Fábrica de Ponchos, Maleteros y Pe-
            lotas de Goma S. A.”

            Fue en aquellos años que Anastasio Santacruz recibió un millonario prés-
            tamo de ganaderos brasileños para criar terneros en grandes cantidades,
            en una vasta región de las pampas interminables del Bajo Paraguá. Fue
            así que Anastasio y Benvenuti construyeron corrales para el ganado, gal-
            pones para los peones, contrataron varios médicos veterinarios, atajados
            y todo lo necesario para echar a andar una empresa ganadera, la más
            grande de la región. La familia Santacruz-Piérola no perdió el rumbo
            del progreso, siempre entusiasmados en llevar a su hijo a la primera
            magistratura del país.
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