Page 16 - LIBRO EN PDF RECUERDOS.wps
P. 16
Afortunadamente Ruperta nunca apareció, quizás
presentía el final.
La sentencia poco a poco se fue cumpliendo, el otro día
me presente con Cuco Montes de Oca, mi querido tío
Alfredo Gómez que ese tiempo era persona muy
importante, pues como amigo cercano de Don
Maximino Ávila Camacho, hermano del presidente de
la República, gozaba de ciertos privilegios, era muy
conocido, querido y respetado y en esa ocasión tan
especial no podía dejar solo a su amado y tremendo
sobrino. La señora Treviño que hacía unos ricos
pasteles, donó un pastel entero y yo con mis escasos
domingos pagué el resto, además de mis pellizcos y
cinco cuerazos.
El tiempo siguió transcurriendo sin pena ni gloria, el
último día se organizó una hermosa fiesta donde la
directora, las educadoras y hasta la conserje y su
esposo colaboraron, haciendo vistosos adornos florales,
y ese día en especial las gelatinas fueron gratis, cada
uno de los asistentes fueron cuidadosamente vestidos.
Estelita llevaba un precioso vestido rosa con blanco, y
los caireles que adornaban su dulce carita la hacían
parecer una hermosa princesita. Tomasín ataviado con
un elegante traje Príncipe de Gales, todo mundo bien
vestido y elegante, y yo con mi modesto traje de
marinero. La maestra Silvia me tomaba de mi mano
derecha y Estelita de la izquierda, a lo lejos mi amada
mamá me miraba con amor y sonreía.