Page 81 - 23 Dalton
P. 81

burado (metano); otros cuatro cuaternarios (del 30 al 33):  ácido
       «oxinítrico», ácido sulfúrico, hidrógeno sulfurado y alcohol; uno
      quinario (ácido nitroso), otro senario (ácido acético) y dos más
      septenarios (nitrato de amonio y azúcar).
          La segunda parte de este primer volumen apareció en noviem-
      bre de  1810. En este caso, como ya hemos dicho, el libro estaba
      dedicado explícitamente a sus grandes colaboradores, sir Hum-
      phry Davy (profesor de Química de la Royal Institution) y Willian1
      Henry ( en aquel momento vicepresidente de la Lit & Phil de Mán-
      chester). Añadió dos nuevos capítulos a los ya escritos: el cuarto,
      dedicado a los principios elementales, y el quinto, dedicado a los
      compuestos de dos elementos, aplicando su principio de máxima
      simplicidad. De nuevo, escasas lánlinas entre el sinfín de explica-
      ciones experimentales. La quinta exhibe los mismos sínlbolos que
      en la precedente, únicamente que corregida y aun1entada. La ex-
      tensión de sus experimentos le llevó hasta 36 elementos y 24 com-
      puestos en total. Entre los primeros, aparecen por vez primera el
      níquel, el estaño, el bismuto, el antin1onio, el arsénico, el cobalto,
      el manganeso, el uranio, el tungsteno, el titanio, el cerio, la alú-
      mina (¿alunlinio?), el sílex (¿silicio?), el ytrio, el berilio y el circo-
      nio. En la sexta lánlina, entendiendo esta como una continuación
      de la anterior, aparecen los símbolos de elementos compuestos,
      hasta un total de 27 identificados. La lánlina séptima representa
      vistas de perfiles de la disposición de partículas constituyentes
      de los fluidos elásticos, así como la representación de partículas de
      nitrógeno e hidrógeno con sus «atmósferas elásticas». Finalmente
      destaca también la octava lámina,  en la que se representan los
      átomos de 16 fluidos elásticos diferentes.
          En 1827 John Dalton publicaría en el segundo volumen de la
      obra los experimentos y procedimientos utilizados para calcular
      las masas atómicas de los metales. A pesar de su aparente com-
      plejidad, resulta sorprendente comprobar hoy en día el grado de
      exactitud en los resultados obtenidos.












                          LA TEORÍA  ATÓMICA. DE  LA GRECIA ANTIGUA A  MÁNCHESTER   81
   76   77   78   79   80   81   82   83   84   85   86