Page 27 - Un Libro de Porqueria

14. FÚTBOL

Yo me dije a mi mismo: Esta es mi materia.

En la primera clase, el profesor nos paró a todos a lo largo de la
cancha, dentro de la pista, en una fila, tocándonos codo con codo.
Muy milico.

Y nos gritó “Mi nombre es Carlos y mi apellido es Guerra, yo me
llamo CARLOS GUERRA”, obviamente largue la carcajada y el
murmullo se hizo generalizado.

A correr todo el mundo grito.

La verdad que la materia me decepcionó.
Guerra no era un mal tipo, pero nos podría haber enseñado algo
más como tácticas, estrategias, sistemas de juego. Etc.

Recuerdo algunas situaciones como cuando le preguntó a Gustavo
Assali: ¿A ver usted, de que juega? y Gustavo le contestó “Delante-
ro, puntero neto”. (Assali no tenía ni idea de fútbol).

También recuerdo que salimos campeones del torneo organizado
por la universidad, en las canchas de 7.

Le ganamos la final a 4to año con baile y nos querían matar.

Teníamos un equipazo, jugaba El Chiqui Pocai, El Polaco Kiriluk,
El Negro Avalos, el Pana De Nápoli, El Chango Fontana, El Sancho
Rossini, Diego Cebrián y yo.
Pero voy a hacer una mención aparte para nuestro arquero estrella,
que no era otro que El Chicle Fernández.

Era un arquero de metegol, petiso, gordito. Llegaba uniformado a
la cancha. Con una remera con hombreras y coderas, de última gene-
ración, los Guantes de color negros y rojos nuevitos, pantalón negro.
Todo combinaba, parecía que se disfrazaba de arquero.

Y saltando no tocaba el travesaño. Dimos ventaja)