Page 30 - Un Libro de Porqueria
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Marcela no entendía nada y con cara de sorpresa, le pregunta: ¿Pe-
ro qué te pasa, Oso?
Y el oso continua “O no sabes que mi hermana tuvo un accidente
de tránsito y esta paralitica, en silla de ruedas y nunca más va a po-
der caminar y mucho menos bailar”.
La cara de Marcela empezó a ponerse pálida y comenzó a hacer
trompita. Las lágrimas no tardaron en salir y le pedía disculpas al
oso entre sollozo y sollozo y lo abrazaba llorando desconsoladamen-
te.
Y nosotros junto al oso haciéndole caras de que eso no se hace.
La tuvo media hora así, hasta que le conto la verdad.
Marcela estaba desencajada, toda transpirada, los ojos irritados
mal.
Y el oso le dice: fue una jodita!!! Subiendo los hombros y mos-
trando la palma de las manos. (Con toda su enorme humanidad)
Nunca escuche tantos insultos seguidos y sin repetirlos!!!
Campano se alejaba a las puteadas.
Si se lo hubiera dicho yo, seguramente no lo hubiera creído.
Salió perfecto!!!
