Page 115 - Donde termina el arco iris
P. 115

CECELIA AHERN                                                             Donde termina el Arco Iris


                     De: Alex
                     Para: Rosie
                     Asunto: Sueños
                     Una vez más, Rosie, no estiras bastante el brazo. Me tienes aquí. Siempre lo he
               estado y siempre estaré.



                     Nota para mí misma:
                     ¡Sueña, sueña, sueña, Rosie Dunne!



                     Tiene un mensaje instantáneo de: RUBY
               RUBY: ¿Qué demonios significa el último mensaje que te ha mandado Alex?
               ROSIE: ¡Por el amor de Dios, Ruby, deja de leer mis e-mails!
               RUBY: Perdona, no puedo evitarlo, así que te aseguro que seguiré leyéndolos hasta
                       que te decidas a cambiar la contraseña o hasta que encuentre un trabajo que
                       me interese, aunque sólo sea un poquito.
               ROSIE: Bien, pues entonces me parece que tendré que cambiar de contraseña...
               RUBY: Ja, ja. Venga, ahora ya lo he visto, ¿a qué se refiere? ¿De qué va eso de estirar el
                       brazo?
               ROSIE: ¿Tú qué crees que significa?
               RUBY: Yo he preguntado primero.
               ROSIE: Vamos, Ruby, no seas tan infantil. Sólo es un amigo diciéndome que siempre
                       estará ahí para lo que necesite, sea lo que sea, que no está tan lejos de mí como
                       a   veces   parece   y   que   no   tengo   más   que   llamarle   para   que   venga   a   mi
                       encuentro.
               RUBY: Ah, vale, muy bien.
               ROSIE: ¡Ya estás poniéndote sarcástica otra vez, Ruby! ¿Cuál es tu nueva teoría, ahora?
                       Supongo que piensas que es una manera secreta de decirme que me ama y
                       que siempre me esperará y que si le tiendo la mano lo dejará todo, su nueva
                       vida en Boston, su vida familiar, su magnífico trabajo, para venir a rescatarme
                       y llevarme a vivir a una casa en una playa de..., yo qué sé..., Hawai, donde
                       seremos felices y comeremos perdices por siempre jamás, lejos de las tensiones
                       y las complicaciones del mundo. Supongo que debes de interpretar algo así.
                       Tú y tu mente enfermiza siempre tergiversando las cosas intentando que
                       parezca que nosotros dos...
               RUBY: No, Rosie, sólo he dicho «muy bien». Sin segundas. Tranquila, te creo.
               ROSIE: Oh.
               RUBY: ¿Te parece bien?
               ROSIE: Sí, claro. Es que pensaba que ya le estabas buscando tres pies al gato como de
                       costumbre, perdona.
               RUBY: No, no pasa nada. Seguro que Alex sólo se refería a su apoyo como amigo.
               ROSIE: Ya... De acuerdo.
               RUBY: ¿Qué pasa? ¿Querías que significara algo más?
               ROSIE: No, por Dios, pero me imaginaba que ibas a soltarme un sermón...
               RUBY: ¿Entonces no estás decepcionada? ¿Te basta contar con él como amigo?
               ROSIE:  ¿Por   qué   iba   a   estar   decepcionada?   ¡Siempre   ha   sido   mi   amigo!   ¡Soy
                       perfectamente feliz!
               RUBY: ¿Y no quieres que te rescate y te lleve a Hawai?
               ROSIE: ¡Por supuesto que no! Eso sería... ¡espantoso!






                                                                                                    - 115 -
   110   111   112   113   114   115   116   117   118   119   120