Page 244 - La introduccion de la Segunda Venida de Cristo a Su Iglesia.indb
P. 244
238 La introducción de La Segunda Venida de criSto a Su igLeSia
vida eterna.
157 ¡Qué sentimiento! Nadie podría expresarlo. Cuando ves un pez muerto tirado en el agua,
con sus entrañas sacadas por la boca, por un hombre de manos grandes que apretó el pez, así,
y lo tomó y lo arrancó. Y se podía oír el desgarro cuando arrancaba las entrañas del pez. Tiró
al pequeño al agua. Se estremeció cuatro o cinco veces, y pateó, y eso fue todo. Para ver a
ese pequeño compañerito, sólo en un momento de hablar esa palabra [el hermano Branham
chasquea su dedo una vez –Ed.] se balanceó de nuevo en condición, tan vivo como siempre lo
estuvo, y nadó hacia abajo a través de esa agua, tan fuerte como podía ir, volviendo a salir para
reunirse con sus compañeros peces.
158 Él es Dios. Él sabía que ese pez estaba allí. Igual que sabía que uno tenía una moneda en
1
la boca . Lo mismo que Él sabía si iba a tirar… Si esa gente, dicen… En San Marcos, el capítulo
5, dice que Jesús tomó prestada la barca de Pedro allí y salió a pescar. Ahora, Él dijo: “Bajen
por la corriente”. Cuando habían pescado, cuando… Incluso sabían que habían pescado toda la
noche y no habían pescado nada. Así como nosotros habíamos hecho lo mismo, y no habíamos
pescado nada. Pero Dios quería ver si ellos tomarían Su Palabra, así que Él dijo: “Suelta la red
para la corriente de agua”. Si no había ningún pez allí, tomando a Dios en Su Palabra pondrá
algunos allí. Eso es todo.
159 Entonces, ese mismo Dios, en Su mismo carácter que era en el principio, es el mismo
Dios por el mismo carácter hoy. Él es el Primero, el Último. Él es el mismo ayer, hoy y
siempre. Él sigue siendo Dios.
HABLA A ESTA MONTAÑA
23 de noviembre de 1959 [59-1123]
San José, California, Estados Unidos
Rev. William Marrion Branham
[Párrs. 38, 39 incluidos en Citas, pág. 29, párr. 248]
[Párrs. 62 y 65 parcialmente incluidos en Citas, pág. 29, párr. 249]
33 Un día, este último otoño, hace unas semanas, descansando un poco antes de venir a
esta reunión, estaba cazando ardillas. Ahora, en nuestro país el conejo y las ardillas es todo
lo que cazan. Y la razón por la que lo hacía era para relajarme un poco antes de venir a esta
reunión. El Sr. Sothmann estaba conmigo esa mañana, había venido de Canadá para visitarnos
y quedarse con nosotros una temporada. Le conseguimos una casa rodante y está viviendo
cerca de nosotros, él y algunos amigos más…
Y así, estuvimos cazando ardillas junto con el Sr. Wood. Y él solo vive al lado mío y es
un amigo que me acompaña. Y entonces, nos fuimos a cazar, y fue el último día en el que
podría cazar porque me disponía a ir a Wyoming el domingo siguiente. Y además la temporada
se cerraría el martes. Y entonces, esto fue un sábado, y sería la última vez que podría cazar
ardillas en el estado de Indiana esta temporada. Oh, habíamos cazado bastante, y había habido
mucha caza. Hay muchos cazadores allí en Indiana por las ardillas. Todas fueron eliminadas.
34 Esa mañana fue una mala mañana, con viento, el viento soplando, y ellas simplemente no
salen en esos días. Y fui al bosque, y caminé hasta cerca de las 9:00, y no pude ver nada. Bajé
o
a la orilla del arroyo, entonces hacía mucho frío en Indiana. Alrededor del 1. de octubre…,
creo que, exactamente, era el 8 de octubre. Y llegué hasta unos viejos árboles de sicomoro. Las
1 San Mateo 17:24-27