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Literatura 5° San Marcos
LOS TEMAS Y SÍMBOLOS RECURRENTES
En sus cuentos, se dan temas recurrentes que suelen estar acompañados de sus respectivos símbolos. Si
Medardo Ángel Silva dice en una caricatura de 1918 de la revista Patria que para hacer un poema Modernista
bastaba incluir una sonata de Chopin, un cisne, una princesa y la luna; entonces para hacer un cuento borgiano solo
es necesario hablar sobre el tiempo o la memoria, tener en el cuento un espejo, un laberinto o un juego de ajedrez, y
arrancar con un escrito encontrado en algún libro.
Los temas en Borges son de corte filosófico: el tiempo y la eternidad, la memoria y la creación atraviesan sus
textos. La concepción borgiana del tiempo encuentra su exposición más clara en El jardín de los senderos que se
bifurcan. El tiempo que se representa dentro del jardín o en la novela de Ts’ui Pen, es de carácter no lineal, pues
cada decisión que tomamos bifurca el tiempo, haciendo de este un entretejido en el que puntos se pueden cruzar,
convirtiéndose en un tiempo-espacio simultáneo y por ende, eterno.
La simultaneidad se simboliza en el laberinto y los espejos. El laberinto es ininteligible para el ser humano que no
está acostumbrado a lo simultáneo. Podemos ver que nadie comprendía la novela de Ts’ui Pen, que era “un laberinto
de símbolos (…) Un invisible laberinto de tiempo”; o que, según Cartaphilus “un laberinto es una casa labrada para
confundir a los hombres; su arquitectura, prodiga en simetrías, está subordinada a ese fin”,14 como lo está la casa
de Asterión.
El espejo, por otro lado, refleja al ser humano y lo multiplica: el espejo es lo uno y lo otro, es, según el poema Arte
poética, el que “nos revela nuestra propia cara”. Al mismo tiempo, al contraponerse con otro espejo, crea un
infinito laberinto de reflejos: mostrando la eternidad. El río será otro símbolo del tiempo y esta eternidad: “Mirar el
río hecho de tiempo y agua/ y recordar que el tiempo es otro río”. Un río capaz de darle la eternidad a quien beba de
él.
“El Aleph” es la cristalización de la eternidad y la simultaneidad, es poder ver todos los espejos al mismo tiempo,
situándose en un “aquí” inamovible: por eso el Aleph es destruido cuando derrumban la casa. Sin embargo, lo
importante aquí es dejar claro que si bien el Aleph es capaz de mostrarle todo al humano. El humano no es capaz de
absorberlo, y menos aún transmitirlo, pues su forma de pensar y el lenguaje no lo permiten. Debido a que no
podemos almacenar toda la información, tenemos una memoria, y por ende tenemos el olvido, que siempre nos
conquista: hemos olvidado el terrible Nombre, volvemos a perdernos en el mismo laberinto, volvemos a aprender y
nos volvemos a sorprender.
Otro tema recurrente es la creación. “En Las ruinas circulares”, el mago “quería soñar un hombre: quería soñarlo
con integridad minuciosa e imponerlo a la realidad”, quería crearlo. El acto de la creación se da a través del sueño y
de la palabra en Borges, ya sea escrita o pronunciada. En el caso de “Tlön, Uqbar, Orbis Tertius”, tenemos un
mundo que existe porque hay una evidencia escrita de esto: sin ese tomo particular de la Anglo-American
Cyclopedia, Uqbar no estarían en discusión dentro del mundo real.
FICCIONES
Ficciones es un libro de cuentos escrito por Jorge Luis Borges, publicado en 1944 y compuesto de dos partes: El
jardín de senderos que se bifurcan y Artificios; posee dos prólogos.
I. El jardín de senderos que se bifurcan
✓ Tlön, Uqbar, Orbis Tertius: Borges, junto a su amigo Adolfo Bioy Casares, discuten una noche sobre la
ejecución de una novela en primera persona cuando, al observar un espejo al fondo de un corredor, éste
recuerda que en un tomo de The Anglo American Cyclopaedia figura una frase memorable de un heresiarca de
Uqbar sobre lo abominable de los espejos y de la paternidad. Al consultar un tomo de la enciclopedia, que
Borges posee en su casa, descubren azorados que allí no hay mención alguna a Uqbar ni al heresiarca, lo cual
deja perplejo a Bioy Casares, quien al día siguiente le comunica a Borges que tiene a la vista el artículo, en su
copia de la enciclopedia. Este hecho los lleva a investigar sobre Uqbar y a descubrir un terrible secreto.
✓ Pierre Menard, autor del Quijote: Borges narra el intento, por parte de Pierre Menard, de reproducir la
popular obra de Don Miguel de Cervantes Saavedra, el Quijote.
✓ Las ruinas circulares: Borges relata los acontecimientos disparados por el desembarco, cierta noche, de un
anciano en una isla que posee unas ruinas circulares dañadas por el fuego.
✓ La lotería en Babilonia: En esta narración Borges imagina una lotería que comienza premiando determinados
números, y que luego, debido a la nula virtud moral de estos sorteos, instituye las suertes adversas para, de
este modo, enfrentar a los compradores de los números al doble albur de ganar una suma o sufrir un castigo
en forma de multa. Al multiplicarse los fraudes contra la Compañía (así se llama la institución encargada de
dichos sorteos) ésta cambia las multas por días de cárcel, y así comienza a ganar poder, llegando, con el
tiempo, a ser omnipotente y ubicua.
✓ Examen de la obra de Herbert Quain: Este cuento a modo de ensayo comienza con la mención de la muerte
de Herbert Quain, escritor, y su tibia mención por parte de la prensa. Prosigue con el análisis crítico de su
obra, la cual, en todos los casos, intenta distinguirse mediante diversos recursos literarios; en el caso de
April March se adivina una estructura fractal, simétrica.
✓ La biblioteca de Babel: En esta pieza Borges analiza las posibilidades, los axiomas y la historia de esta
biblioteca, compuesta —a grandes rasgos— de galerías hexagonales que poseen, cada una, un pozo de
ventilación en su centro, cuatro paredes recubiertas de veinte anaqueles distribuidos a razón de cinco por
cada una de ellas. Cada galería conecta, por medio de un angosto zaguán, con otra idéntica; cada anaquel
alberga treinta y dos libros compuestos por cuatrocientas diez páginas que a su vez contienen cuarenta
renglones y cada renglón ochenta letras. Los libros son uniformes, y el alfabeto consta de veinticinco
caracteres incluyendo los signos de puntuación.
Compendio -67-