Page 74 - DIALOGOS ACOFAEN LIBRO 1
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ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE FACULTADES Y ESCUELAS DE ENFERMERÍA

               comportamientos. Pero desde el día en que nace, la pareja que ha buscado ese bebé
               y que ha sido sorprendida con el nacimiento de ese niño o niña, empieza a demostrar
               modelos, actitudes y forma de pensar, protocolos que hay en cada familia y en cada
               pareja; por ejemplo, hay familias alegres, hay parejas muy sociables, hay otras rígidas, y
               eso lo va aprendiendo ese niño o niña en el transcurso de la vida. Igualmente va
               sucediendo con las normas, la forma de comportarse, de saludar, de respetar a los
               mayores,  a  las  autoridades;  entonces  la  influencia  de  la  familia  es  total  en  cada
               comportamiento. En este proceso la cabeza tradicionalmente la ejerce la mujer, quien
               va guiando estas conductas y haciendo las correcciones de autoridad, que van a
               influir, en denitiva, en ese ser humano que está creciendo en ese seno familiar.

               ACOFAEN: (M.C.G.A.)

               ¿Queremos conocer qué está enseñando la familia a sus hijos actualmente? ¿Cuál es
               el predominio de esa enseñanza actual? ¿Hacia dónde se deben enfocar los padres
               para coadyudar en la educación?

               INVITADA: (J.M. de U.)

               Desafortunadamente, ante el ingreso y por los derechos de la mujer en participar en la
               vida económica y laboral del mundo, las madres salieron del hogar y dejaron de ser
               ese eje del que hablábamos hace unos momentos, donde ellas estaban pendientes
               de  la  educación,  del  vestuario,  de  la  alimentación,  de  la  economía  familiar,  y
               cotidianamente daban  recomendaciones a sus  esposos,  a los  hijos  en  la familia  y
               corregían y ponían principios y normas.

               Cuando la mujer sale al campo laboral, nunca este medio laboral, ni la economía
               mundial, reflexionaron  porque la mujer  no debería  tener un horario diferencial para
               cumplir sus actividades laborales, pero al mismo tiempo ser la gerente de su casa y
               hogar,  de  esa  familia  que  es  el  núcleo  de  la  sociedad.  Por  ello  empezaron  a
               desaparecer esas normas, ese continuamente enderezar, como decían los abuelos,
               hay que corregir, enseñar cómo se come, cómo se toma y se utiliza un cubierto en la
               mesa, cómo se saluda al maestro, a los padres. A las entrevistas del colegio, muchas
               veces  los  padres  no pueden ir  o  están  ausentes,  ya no  llegan los padres  a  esas
               reuniones  de  grupo  donde  se  discutían  asuntos  educativos,  casi  siempre  por  sus
               ocupaciones laborales. Pero la pandemia, hoy, obligó a la mujer, al compañero o
               esposo o padre y a los hijos, a reunirse y a estar más tiempo en el hogar, y empezaron
               nuevamente a ponerse las normas: - no grite, no sea altanero, por qué no se sienta a
               comer con nosotros, no coma en el cuarto, venga conversemos todos juntos, entonces
               estamos  escuchando  a  las  familias,  que  están  en  un  proceso  de  acomodación,
               considero  que  no debemos perder  este momento.  ¿Por  qué?  Porque ese hijo,  ese
               adolescente, y nosotros inclusive, debemos tener claridad de unas normas en el hogar,
               con libertad, con cosas permitidas y cosas que no se pueden hacer; por ello debemos
               enseñar  esos  principios  de  autonomía,  auto  decisión,  de  independencia,



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