Page 22 - GÉNERO Y SALUD EN CIFRAS • Septiembre - Diciembre 2008
P. 22
Cuando las instituciones despojan a las jóvenes o a las pare- si existen, funcionen como redes de apoyo, cuidadores o
jas de sus hijas e hijos, lo hacen argumentando que no serán proveedores de las mujeres y sus hijos e hijas. También pue-
o son buenas madres y que su intención es que los bebés den ser quienes sancionen las conductas “antinatura” de
crezcan en mejores condiciones de vida. En ocasiones, se- algunas de ellas al no hacerse cargo de sus hijas e hijos, y
ñalan que lo hacen por el bien de las mismas jóvenes. Esta quienes a partir de esta sanción reproduzcan el orden de la
sanción moral y social, más que ayudar a reflexionar o a demanda social para cada uno de los géneros, principalmente
19
aligerar la responsabilidad, genera en las madres –y padres– para aquellas jóvenes quienes son o han sido madres .
sentimientos negativos hacia las instituciones y la sociedad
en general; la culpa es un sentimiento frecuente ellas, y en Siguiendo lo anterior, las reacciones de exclusión, sanción
ocasiones en ellos, porque no fueron buenas madres, y todo moral y control formal dirigidas particularmente a las muje-
ello trae como consecuencia el incremento en el consumo de res que viven en la calle y son madres, implica para su salud
drogas 19, 20 . Y la no adherencia institucional por parte de ellas. física y mental, entre otras cosas, ser excluidas de los siste-
La vivencia de la maternidad, entre apariencias y contradic- mas de salud, programas sociales, laborales y escolares; son
ciones, entre lo que piensan, dicen y hacen las jóvenes entre- población cero, como lo expone Cosío Villegas , lo que tiene
10
vistadas, tiene que ver con las características y las creencias como consecuencia la desnutrición, falta de oportunidades,
del grupo de pertenencia . La demanda del grupo y las exposición a estresores y por supuesto el incremento del
21
formas de sobrevivencia hacen que las jóvenes roben, se consumo de substancias tóxicas que merman su salud física,
droguen o dejen a sus hijas e hijos al cuidado de otros. Es- neuronal y mental. Es decir, se perpetra la violencia simbó-
tas actividades que ocasionan “irresponsabilidad” materna lica, la exclusión social y la reproducción de la feminización
hacen que el grupo y los padres (biológicos o adoptivos), de la pobreza.
conclusIones
La conformación de nuevas sociedades no sólo genera nece- las representaciones sociales que tienen de la mujer siguen
sidades que requieren mecanismos de sobrevivencia e inte- prevaleciendo dos modelos predominantes: el de la mujer
racción entre los individuos, sino que también son el mar- puta o el de la mujer buena y pura .
23
co de interacciones simbólicas que establecen pactos que
norman las prácticas sociales. Dichos procesos producen la Centrándonos en el modelo de mujer “puta”, se entiende
emergencia de las colectividades y su definición –identi- que en este grupo se encuentran aquéllas que hacen uso
22
vii
dad– , es decir, con el crecimiento de las ciudades deviene arbitrario y elegido de su cuerpo, no necesariamente se
una estratificación de las sociedades, además de la eviden- apegan a la demanda social del cuidado y la crianza de hijos
cia de multietnias, culturas alternativas y grupos marginales e hijas, realizan actividades que son tenidas como propias
presentes en ellas. Tal es el caso de las niñas y jóvenes que de los hombres, o bien, no acceden a las demandas de na-
viven en la calle. turaleza sexual de algunos hombres, como es el caso de las
jóvenes entrevistadas. Motivo por el cual son severamen-
Para las jóvenes el proceso de reproducción del rol feme- te sancionadas social y moralmente y hasta castigadas por
nino y de la satisfacción de las demandas sociales es muy las instituciones de atención a la infancia callejera o por las
importante, es decir, la aceptación o rechazo hacia lo que propias familias, ya que las niñas y jóvenes que viven en
hacen las mujeres y cómo son las mujeres. Al parecer, en la calle que transgreden a la maternidad ordenada dentro
vii Entendemos por identidad “el sistema unitario de representaciones de si elaboradas a lo largo de la vida de las personas a través del cual ellas prueban
que son siempre iguales a si mismas a la vez que distintas a otras personas y dignas por ello de ser reconocidas en su particularidad”. Ver referencia.
Página Volumen 6 • No. 3 Septiembre - Diciembre
20 Género y Salud en CifraS 2008