Page 60 - ¿Quién fue mi abuela Emilia?

de Madero, en el Centro —negocio que todavía existe—.

Yo creo que mi abuela no abrió un restaurante vegetariano porque la verdad es
que no le gustaba cocinar. Aunque cocinó para sus hijos mientras eran chicos, le
parecía que había cosas más importantes que hacer en la vida que estar metida en

una cocina: a mí a veces me decía que si pudiéramos comer como los
astronautas, es decir, con unas pastillas, estaríamos mejor (aunque en realidad no
sé si de veras los astronautas comen pastillas). Supongo que muchas amas de
casa que tienen que cocinar desayuno, comida y cena para toda una familia todos
los días pensarán lo mismo (alguna vez le oí decir a alguna: “Maldito vicio el de
la comida, ¡tres veces al día!”). De todos modos, mi abuela cocinaba, y creo que
de esos restaurantes vegetarianos sacó algunas de las recetas que luego se
quedarían en la familia. Hacía jitomates rellenos de aguacate, tortitas de papa,
tacos de chícharo, chayotes rellenos, tacos de flores de colorín, agua de apio…
Mi favorita era la de la granola, que alguna vez hicimos juntos. Cada quien la
hace como le gusta, pero yo prefiero esta receta de mi abuela:

GRANOLA

4 tazas de avena

1 taza de coco

1 taza de cacahuates

1/2 taza de ajonjolí

3/4 cucharadita de sal

1 cucharadita de canela

1/2 taza de miel

1/3 taza de aceite

1 taza de dátiles

1/2 taza de pasitas