Page 61 - ¿Quién fue mi abuela Emilia?

1/2 cucharadita de vainilla

Luego hay que revolver todo y meterlo al horno. Ya en el horno, hay que
revolver de vez en cuando hasta que todo esté dorado; las pasitas van al último
para que no se quemen. Creo que con media hora basta, pero no recuerdo qué tan
caliente debe estar el horno. Todavía hago granola y me acuerdo de mi abuela
(debo decir que, a diferencia de ella, a mí sí me gusta cocinar, que es algo que le

saqué a mi mamá, y no me gustaría comer pastillas de astronautas). Sin embargo,
mi abuela cocinaba más por necesidad que por gusto, y muchas veces cuando yo
iba con ella terminábamos yendo a comer al restaurante que estaba a la vuelta de
su casa. Eso sí, nunca comíamos carne.

Para mucha gente el vegetarianismo no llega solo, sino que viene con un paquete
de otras muchas ideas. Con mi abuela llegó con el paquete completo: llegó con
ideas ocultistas que ya antes había compartido con su esposo. En 1936 ambos
asistieron a las pláticas que el “maestro ocultista” Miguel Kramer dictaba en la
calle de Guatemala. Este hombre dictaba conferencias acerca de clarividencia y
poderes interiores, entre otros muchos temas de ocultismo. La clarividencia es la
facultad sobrenatural de percibir sucesos lejanos que no son perceptibles con los
sentidos, o también de adivinar sucesos futuros. La clarividencia es un tipo de
percepción extrasensorial, es decir, que está más allá de la información que
obtenemos a través de los cinco sentidos. Mucha gente piensa que esto es
charlatanería. Tal vez Jesús pensó lo mismo y dejó de asistir, pero Emilia siguió
las conferencias. Luego dejaría este tipo de ocultismo. Sin embargo, una cosa
lleva a otra, y tras la muerte de su esposo entró en contacto con la teosofía.
Emilia se hizo miembro de la Sociedad Teosófica en 1941.

La teosofía es una doctrina esotérica que sostiene que todas las religiones
constituyen intentos de los seres humanos de acercarse a Dios y que, en
consecuencia, cada religión posee una porción de una verdad universal. “No hay
religión más elevada que la verdad” es el lema de la Sociedad Teosófica. La

teosofía es un estudio comparado de religiones, filosofías y ciencias; un estudio
que busca lo que de “sabiduría divina” pueda haber en ellas. El movimiento
teosófico moderno tuvo su origen en las ideas que la pensadora rusa Madame H.
P. Blavatsky plasmó en sus libros Isis sin velo y La doctrina secreta. Emilia tenía
ambos libros en su biblioteca, y fueron importantes para ella. Isis sin velo
describe la historia y el desarrollo de las ciencias ocultas, la naturaleza y el