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Resumen

La resolución de problemas no es una conjetura, no es un enfoque aleatorio de la resolución de problemas,
y no es una escopeta o una técnica de tiro en la oscuridad. Si no entiendes esto, te has perdido el objetivo
de este apéndice. Si no lo sabe, tendrá dificultades para resolver problemas y arreglar sistemas complejos.
Definimos a un solucionador de problemas como alguien que localiza y resuelve problemas. La resolución
de problemas, por tanto, es el arte y la ciencia de localizarlos. La palabra clave en ambas afirmaciones es
localizar. Hay que buscar, centrarse en el problema utilizando técnicas sistemáticas y específicas. Por
supuesto, una vez que se han encontrado los problemas, se pueden corregir.
El término "solución de problemas de escopeta" es una palabra de cuatro letras. Lo sé, son dos palabras y
22 letras; pero, aun así, es un término sucio, obsceno e inaceptable. El enfoque de la escopeta implica
disparar con un amplio patrón de tiro y esperar dar con algo. Es un signo de un pobre solucionador de
problemas, un signo de alguien que se ha rendido y está buscando a tientas en la oscuridad una respuesta.
A partir de este momento, debes considerar la resolución de problemas como un enfoque sistemático para
encontrar problemas (averías). Conocerás tu equipo, conocerás tu profesión (la de solucionador de
problemas) y mejorarás tanto en el arte como en la ciencia a medida que prosigas tu carrera.

Buena suerte y que todos sus problemas sean localizados.

1Comentario en la sobrecubierta del libro This Is Your Captain Speaking, del capitán Thomas M. Ashwood,
presidente nacional de Seguridad de Vuelo de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, publicado por Stein
and Day, Briarcliff Manor, Nueva York, 1975.

Apéndice D Investigación De Las Alertas De Fiabilidad
Introducción
Durante una visita a una pequeña pero prominente aerolínea internacional para ayudar con su programa
de fiabilidad, el jefe del departamento de ingeniería -que era nuevo en el trabajo y no tenía muchos años de
haber salido de la universidad- le preguntó al autor: "¿Cómo hago para investigar estas alertas de
fiabilidad?". No era una pregunta que se respondiera rápida o brevemente. La suposición de que los
ingenieros sabrían qué hacer no siempre es válida, porque encontrar un problema ya es bastante difícil, y
saber por dónde empezar y cómo proceder para resolverlo no suele ser más fácil. La respuesta dada era
general pero aceptable. Más tarde, al escribir este libro, el autor amplió la explicación al material de este
apéndice. El proceso resultante no encontrará todas las respuestas, y no le proporcionará procedimientos
de corte y secado, pero debería ayudarle a centrarse en los problemas únicos que deberá resolver en estas
investigaciones de fiabilidad. Comenzaremos con una revisión de la fiabilidad y una rápida discusión del

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