Page 143 - La Constitución de los atenienses
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LA CONSTITUCIÓN DE LOS ATENIENSES
blaran y deliberaran [sólo] los pudientes, [decidirían] lo que
es bueno para sus propios iguales, pero no lo que es bueno
para los populares. Pero ahora quienquiera, en virtud de que
puede hablar, aun siendo un hombre miserable, toma la pa
labra y consigue lo que es bueno para él mismo y para sus
iguales. 7 Se podría decir: “¿Entonces, cómo podría recono
cer lo que es bueno para él y para el pueblo un hombre
como ése?” Ellos saben que la ignorancia, la maldad y la be
nevolencia de ese hombre son más útiles que la virtud, la
sabiduría y la malevolencia del pudiente. 8 Entonces, una
ciudad no puede ser la mejor con tales costumbres, pero la
democracia sobre todo así puede conservarse. El pueblo, en
efecto, no quiere ser esclavo en una ciudad bien gobernada,
sino ser libre y tener el mando, y del mal gobierno él poco se
preocupa, pues gracias a aquello que tú consideras que no es
un buen gobierno el pueblo es fuerte y es libre. 9 Pero si
buscas un buen gobierno, verás primero a los más diestros
establecer las leyes para ellos; en seguida, que los pudientes obs
taculizarán a los miserables y que ellos mismos deliberarán so
bre la cosa pública y no permitirán a hombres fuera de juicio
deliberar ni hablar ni participar en la asamblea. Así pues, por
estas buenas medidas el pueblo caería de inmediato en esclavi
tud.
10 Por otra parte, en Atenas el desenfreno de los esclavos
Y de los metecos es muy grande, y no está permitido ahí gol
e arlos, ni te cederá el paso el esclavo. Por qué existe esa cos
tumbre local te lo explicaré. Si fuera legal que el hombre
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