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MEMPHIS. LAS PIRAMIDES 207
de la propia manera á la vaca que le diera vida, á la cual según se creía había fecundado
un rayo de luna. En cuanto se daba con un nuevo Apis, celebrábase la nueva con grandes
regocijos en todo el país, y agasajábase con dones espléndidos á los afortunados posesores
del animal. Los sacerdotes debian examinar desde luego si reunía todas las circunstancias
ó señales sagradas que debian caracterizarle, que al decir de Ebano no bajaban de veintiocho:
pues entre otras que no enumeramos, debía ser de negro pelaje, y tener en la frente un
triángulo blanco, en el lomo una figura de avestruz, y en el costado
derecho una media luna también blanca: los pelos con que terminaba
la cola debian ser de dos colores distintos, y en la boca, debajo de la
lengua habia de tener una excrecencia ó protuberancia semejante á un
escarabajo sagrado. No hay para que decir el cúmulo de ceremonias
que era preciso celebrar ántes de encerrar el animal en el templo.
Cuando moría embalsamábase su cuerpo cuidadosamente, siendo tras-
portada su momia á las cuevas en cuya entrada nos hallamos, y cuyo
ESCARABAJO
ATEUGHCS SACER
descubrimiento refiere Mariette en los siguientes términos:
«La tumba de Apis, es un edificio completamente subterráneo, debiendo confesar que
»al penetrar en él por vez primera, el dia 12 de noviembre de 1851, sentíme acometido
»por una profunda impresión de sorpresa, que después de cinco años transcurridos no se
»ha desvanecido completamente.
» Gracias á una casualidad que no he
» logrado explicarme, habia escapado
ȇ los espoliadores del monumento
»una de las cámaras de la tumba del
»buey Apis, tapiada en el año 30 de
»Ramses II, y por consiguiente cupo—
»me la dicha de encontrarla intacta.
»Nada habia cambiado en ella en los
» 3,700 años que de entonces acá van
» transcurridos, de suerte que se dis—
»tinguian perfectamente las huellas do-
»la mano egipcia que puso la última
» piedra en el muro que se levantó
»para tapiar la entrada. En un mon—
»toncito de arena existente en uno de
»los ángulos de la cámara mortuoria,
, - , , n 1 • ^ SEPULCRO DE APIS
» veíanse marcadas las huellas de pies
» desnudos. Nada absolutamente se habia tocado en ese sepulcro en cuvo interior se sepultaba
'-i hacia cerca de cuarenta siglos un buey embalsamado. De seguro no serian pocos los viaje-
»ros que se horrorizarían ante la idea de vivir durante cuatro años en un desierto, poco