Page 477 - Egipto Tomo 1
P. 477

EL CAIRO                    395
             que encontraban al paso, por considerar el culto que se prestaba á los que en ellas pacían,
             como fuente de corrupción del principio monoteista. La verdad es que en el Karafeh, menos &e
             adora al omnipotente é infinito Alah, que á los que yacen en las tumbas. Los miembros de
             todas las sectas encuentran aquí el sepulcro de los jefes más importantes del ritualismo que
             particularmente profesan: y aquí, debajo las bóvedas de un mausoleo suntuoso,  a ese  el
             sarcófago que contiene los restos mortales del Imán Shafei  ,  el fundador de la ciencia del
             derecho canónico,  el venerado jefe del rito á que diera su nombre, que era el que prevalecía
             en Egipto ántes de la dominación turca.  El espíritu egipcio, siempre pronto á crear nue\a^


























                                     ATAUD DE ISMAIL- BAJÁ
             tradiciones, ha circundado con una bella corona de leyendas la vida y la persona del hombie
             y del sabio extraordinario, y hasta respecto de su kubba hanse imaginado las más peregrinas
             concepciones. Así creen los cairotas á pié juntillas que su puerta está siempre dispuesta á
             abrirse para dar paso á un creyente ; pero que en cambio permanece siempre cerrada ante el
             impío que ha dejado penetrar en su corazón el torcedor de la duda, añadiéndose que esta
             propiedad milagrosa de  la puerta que conduce  al sepulcro del sabio y  santo varón, ha
             desenmascarado á más de un hipócrita. Una gran parte del cementerio lleva el nombre de
                             visitan también con preferencia, entre otras que no citarnos,  la
             Shafei. Los extranjeros
   472   473   474   475   476   477   478   479   480   481   482