Page 13 - 4 : El gran desafío

I

Llegada la fecha, ansiosa por tener el placer de reunirme con personalidades de tal

índole, de camino a la oficina pensaba qué preguntas les haría. Claro, no podía hacerles

perder ni un minuto de su tiempo tan valioso en el que habían dejado de lado sus

quehaceres personales para darme una entrevista a mí (que no era conocida en los

medios aún). Eso hablaba muy bien de ellos. Quizá su disposición tan amigable se

debía a que les parecía positivo que todavía haya personas buscando las maneras de

progresar y dar un giro a la situación actual. Lo más fácil para mí, seguramente, hubiese

sido continuar con la programación del canal sin introducir cambio alguno; pero si

estaban cambiando de Programador por algo era, y este era mi gran desafío.

Tras las presentaciones formales y mis agradecimientos por su honorable

presencia, les expliqué mis propósitos de tal convocatoria. Es decir, amplié aquello que

les había mencionado de manera sintética en los mensajes y llamados de invitación:

quería tener la opinión de cada uno de ellos sobre temas que, a mi entender, son las

bases fundamentales para comprender el mundo de la televisión y, de esa forma, poder

montar un contenido no solo redituable al canal, sino que también atractivo, interesante

y educativo para los televidentes. A medida que hablaba observaba cómo

intercambiaban miradas; parecían ser desafiantes, ya que entre ellos tenían el placer de

conocerse y, cada uno, defendía su propia postura, en algunos casos más discrepantes

que en otros, acerca de la televisión.

Para comenzar nuestro intercambio de ideas lancé, de manera muy natural, mi

primera pregunta: ¿Para ustedes, qué importancia tienen los géneros audiovisuales?

El primero en tomar la palabra fue Valerio Fuenzalida, para él, los géneros

audiovisuales tienen más importancia de la que creemos. Sostiene que la gente

11