Page 111 - Abrázame Fuerte
P. 111

general a la mesa y, en tono altivo, dice:
        —Uy, parece que hoy les han dado fiesta en la guardería… Qué honor tener
      a todos los bebés aquí…
        —Uy…  Parece  que  hoy  han  soltado  a  las  barbies  —responde  Estela,
      imitando la voz de la chica—. Qué honor tener a todas las pijas aquí…
        Las Princess se ríen. Incluso Ana, que aunque parezca que se esconda, no
      puede evitar mirar a Nerea. « Cómo va vestida… Con esas mallas y esos tacones
      de aguja. No le pega nada a David» , se dice.
        La verdad es que el chico está más o menos de acuerdo. No sabe muy bien
      cómo ha llegado a ese punto. Nerea se comporta como si fueran novios, y a él le
      da  muchísima  vergüenza  reconocer  que  siente  algo  por  Ana,  aunque  no  sabe
      muy bien lo que es. El carácter de Nerea es muy fuerte y le da pánico cómo
      pueda reaccionar si nota que no quiere que sean novios formales. Aunque tenga
      esta actitud cobarde hacia ella, no puede evitar levantarse y hacerse un poco el
      machito.
        —¿Todo bien,  Nerea?  —dice,  tras haber observado  el  espectáculo  desde la
      lejanía. Se siente con la obligación de intervenir.
        —Sí, estas niñas, que están un poco colgadas, y las estaba invitando a sentarse
      con nosotros. ¿Te parece bien?
        « Qué rabia de tía —piensa Ana—, se hace la buena delante de él. La muy
      arpía…» .
        —Sí,  claro,  podemos  juntar  las  mesas.  ¿Me  ayudas?  —le  pide  David  a  su
      hermana. Cree que éste es un buen modo de hacer las paces con ella.
        Silvia  no  sabe  cómo  reaccionar.  ¿Debe  o  no  debe  ayudar  a  su  hermano  a
      juntar  las  mesas?  Mira  a  Ana,  implorando  una  respuesta.  Su  amiga  se  quiere
      morir. « No lo voy a soportar… No lo voy a soportar» , piensa. Estela le aprieta
      fuerte la mano y le dice al oído:
        —Tranquila, princesa, todo saldrá bien.
        Mientras se juntan las mesas, David y Ana ni se miran. Ante la actitud de
      ella,  David  siente  como  si  la  chica  fuese  una  desconocida.  Eso  duele.  Antes,
      cuando ella le gustaba y no había nada entre ellos, el chico podía fantasear y
      soñar sin límites, pero ahora siente que todo se ha vuelto en su contra y, además,
      ella se está comportando como una cría.
        David mira a Nerea: es la novia que a todo chico le gustaría tener. Guapa,
      popular  y  divertida,  es  tan  diferente  a  Ana  que  si  fuesen  dos  planetas  en  el
      sistema solar estarían a mil años luz, como mínimo. Si pudieras elegir un planeta
      donde vivir, ¿cuál elegirías? ¿El planeta de Nerea o el planeta de Ana?
        Estela está todo el rato pendiente de su amiga, y Nerea no le quita la vista de
      encima a David. Una vez todos vuelven a estar sentados en grupo, la universitaria
      empieza a fastidiar con preguntas ridículas:
        —Y ¿qué tal, niñas?… ¿Cómo va el cole?
   106   107   108   109   110   111   112   113   114   115   116