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No sólo hacíamos investigación cuántica, sino que también verificábamos los efectos en nuestros propios cuerpos. Cabe
destacar que la que llamábamos "HP" ("Horno Purificador"); de 3,5 m de base, era la más potente, con sus 8 mm de
espesor. Unas cinco veces más potente que una pirámide normal de las que construyo ahora para dormir. Más que dormir,
eso era una terapia contra toda peste, pero las sensaciones solían ser muy desagradables al principio; la relajación era tal
que tras ocho horas de sueño profundísimo, uno tardaba cuatro o cinco horas en volver a funcionar normalmente, con
cierta "sensación de zombi", pero mentalmente lúcido. Llegué a temer que me estuviera produciendo miastenia gravis,
dada la flojedad del cuerpo, pero un par de análisis demostraron que todo estaba mejor que bien. Sin embargo, luego de
dos o tres meses, bastaban tres o cuatro horas de sueño para andar como un tren.
Pero ocurre que la mente necesita sus horas, así que determinamos, a lo largo de casi seis años, que la proporción más
adecuada es la que hemos empleado en los nuevos ángulos extruidos, que además, tienen la ventaja de permitirnos elegir
la fórmula de aleación. La que usamos posee menos del dos por mil de hierro y una mayor cantidad de sílice, que es tanto
o más beneficioso que el propio aluminio. Las medidas óptimas son de 2,10 de lado, con ángulos de 100 mm de ala y 3
mm de espesor. Si el vidrio no fuera tan frágil, caro y difícil de manipular, las haría de cristal.
PSICOLOGÍA Y PARAPSICOLOGÍA PIRAMIDAL
El C.I. (coeficiente intelectual) varía según muchos factores. Los principales son psicológicos, genéticos, culturales o
circunstanciales, pero los psicológicos son los más determinantes de los orgánicos. La pirámide puede influir de varias
maneras en la elevación del C.I., pero los "milagros" son limitados. No obstante, la acción sobre lo orgánico es tal, que
permiten al usuario (que vive o al menos duerme en una pirámide) empezar desde lo orgánico una revolución interna,
curativa y catártica. Ejemplo de factores:
1) PSICOLÓGICOS: Una persona que mire dos o tres horas de televisión diariamente, corre el riesgo de volverse
idiota aunque la mire metido en una pirámide. Las taras psicológicas que absorberá serán algo muy difícil de catartizar. El
C.I. se disminuye porque en vez de ser la persona un ente creativo, se vuelve puramente receptivo y de la peor calidad de
información que puede existir en la historia de esta humanidad.
Los "yoes psicológicos" no eliminados por auto-observación y los adquiridos en ambientes familiares o sociales
patológicos, producen también una importante caída del C.I. porque los parásitos emocionales se nutren de los tres
atributos del Ser (y su foco, que es la Conciencia): INTELIGENCIA, AMOR y VOLUNTAD. (sobre los asuntos metafísicos,
recomendamos muy especialmente este libro: La Biblia III: testamento de todos los tiempos).
No se puede pedir a la pirámide que nos purifique mental y emocionalmente si vivimos consumiendo basura
desinformativa y venenos psíquicos. Alguien con "conciencia piramidal" debe buscar su Trascendencia eliminando los
hábitos más dañinos. No obstante, las condiciones físicas dentro de la pirámide son óptimas para prácticas de relax y
meditación, siempre que el sujeto no esté cansado o con sueño, porque el poder relajante es muy notable y se quedará
dormido en minutos. Los usuarios de Piramicamas hacen sus meditaciones en la mañana, después de haber dormido,
porque la mente estará muy lúcida pero el cuerpo estará muy relajado.
2) GENÉTICOS: Los factores genéticos son bastante determinantes, pero la mente y el cerebro pueden mejorar hasta
niveles sorprendentes, con la ejercitación adecuada (y lógicamente acompañada de alimentación y modo de vida
adecuados en general). En este aspecto la pirámide contribuye indirectamente, reforzando algunos procesos bioquímicos
cerebrales. En lo que realmente tenemos un beneficio genético, es en la disminución de la incidencia de factores que
alteran el ADN y en la reconstitución del mismo a nivel cuántico. Átomos mejor formados, por lo tanto moléculas más
estables, igual a células más sanas.
3) CULTURALES Y/O CIRCUNSTANCIALES: Si a uno le dicen desde pequeño que es un inútil, que es un burro, y
lindezas de esas con las que los ignorantes padres y maestros suelen llenar la mente de los niños, el C.I. se verá
drásticamente disminuido por mucho tiempo. Recuperar el C.I. que la genética tenga como potencial, será cuestión de
romper con esas creencias erradas sobre uno mismo. La pirámide en este aspecto sólo tiene influencia como coadyuvante,
desde lo orgánico, cuando uno se propone esa liberación y desbloqueo del C.I. Estos factores se enlazan con los
psicológicos, porque hay un "yo inútil", que dice "yo no puedo", "yo no sé ni sabré...". Hay que romper con eso y poner a
trabajar la mente y las neuronas en cosas creativas.
4) ORGÁNICOS: Aquí es donde realmente la pirámide tiene sus efectos directos. La tasa vibratoria más armónica y el
aumento de neutrinos incidentes en el cuerpo, entre otras causas, hacen que las células (todas, no sólo las neuronas),
trabajen mejor, más libres de substancias tóxicas del medio ambiente y el consumo, más relajado el sistema nervioso y los
músculos, con mejor irrigación sanguínea merced a la mayor tensioactividad del agua en nuestro cuerpo, etc..
El C.I., como ya dije, se verá beneficiado en la medida que atendamos a los factores anteriores. La pirámide
contribuirá no sólo desde el efecto orgánico, mejorando las funciones físicas de las neuronas, pero ese es el factor
principal. Cierto que no es poco, puesto que en lo orgánico radica la mitad de nuestro Ser como persona. Las actividades