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PIRAMIDES Y ALCOHOL
                   No  es  un  remedio  efectivo  para  el  alcoholismo  como  enfermedad,  pero  puede  ser  un  coadyuvante  psicológico.
           Sucede que el alcohol se potencia dentro de la pirámide, estando en una botella o en nuestro propio cuerpo. Pero cuando
           está en nuestro cuerpo, la potenciación no produce precisamente un aumento de la borrachera, sino una descompostura
           bastante desagradable.
                   No ocurre así cuando se ha bebido normalmente, pero cuando se bebe de más, teniendo alrededor de un gramo de
           alcohol por litro de sangre, la transformación de las moléculas de alcohol (en realidad una reestructuración perfecta), las
           hace más difíciles de metabolizar. Si se ha bebido en demasía, es necesario esperar dos horas antes de acostarse en la
           pirámide para evitar un fuerte dolor de cabeza y sensaciones muy desagradables. Quienes tienen problemas para controlar
           el  alcohol  encuentran  en  la  pirámide  unas  descomposturas  que  aunque  son  innocuas  clínicamente,  desalientan  el
           consumo.

           DOLORES DE CABEZA
                   Millones de mujeres en el mundo sufren de dolor de cabeza constante. Más del 90 % de ellas deben su particular
           tortura a los secadores de cabello. Aunque se resisten a dejar de usarlo, deberían saber que el aire pasa a través de una
           resistencia eléctrica, cuyo campo electromagnético les llena el áurea del cuerpo con iones pesados. Hay dos cosas que
           debe hacer la persona que sufre dolores de cabeza por esta razón: La primera, es no volver a usar secador de cabello. Si
           en  dos  semanas  sin  usarlo  no  nota  la  diferencia,  entonces  será  un  médico  quien  deba  estudiar  más  el  problema.  Lo
           segundo, es disponer de una pirámide de unos cincuenta centímetros de lado, para colocar en ella la toalla que usará para
           secarse en reemplazo de ese aparato. El aire electropositivamente cargado del secador tiene una composición irregular,
           donde los protones, los radicales libres y otros elementos oxidantes abundan.

                   Estos actúan sobre el cuero cabelludo haciendo envejecer más rápido las células superficiales. Pero también, por la
           dilatación de los poros, alcanzan a entrar en el bulbo pilífero. Las mujeres que usan siempre secador de pelo tendrán -
           aparte  de  que  sufran  o  no  los  otros  problemas-  un  cabello  más  envejecido  y  débil.  Quienes  dormimos  en  pirámides
           notamos  en  la  salud  capilar  -muestra  de  la  salud  integral-  que  todo  mejora.  Se  corrigen  los  problemas  de  cabello
           extraseco, así como desaparece el problema de las puntas abiertas.

                   Ello se debe a la mejor hidratación general y al fortalecimiento del bulbo pilífero. Disminuye el riesgo de alopecia y se
           corrige cuando ésta ha comenzado. Tengo registrados cuatro casos de personas que estaban perdiendo inexorablemente
           el cabello y dejaron de perderlo al comenzar a dormir en pirámides, para recuperar lentamente su pelo en algunos meses.
           No  hay  indicios  de que las  personas con  calvicie  genética  ya  establecida  recuperen el cabello,  pero  igual faltan  datos
           estadísticos. En cuando a dolores de cabeza no habituales, -y siempre que se pueda descartar el origen hepático por
           disfunción- en vez de consumir una aspirina con su excipiente de talco, conviene diluirla en un vaso de agua tratada en la
           pirámide, de la que conviene tener siempre algunas botellas disponibles; esperar a que precipite el talco de la pastilla y
           beber el agua.

                                               En la imagen tenemos la foto de un Amigo que nos apasiona con sus pesquisas y
                                       análisis,  el  periodista  y  excelente  investigador  de  los  misterios  J.  Manuel  Frías.  Le
                                       hemos agregado el dibujo de una pirámide tal como mucha gente la usa. Cabe advertir
                                       que estas sesiones deben hacerse de un máximo de cinco minutos, porque la parte de
                                       antipirámide no carece de riesgos. Este uso, siempre con la pirámide hecha de material
                                       adecuado (vidrio, plástico, madera o aluminio) suele darse para tratar problemas en las
                                       cuerdas vocales, disfunciones de tiroides, etc., así como odontalgias leves, para dolores
                                       de cabeza causados por exposición prolongada a campos electromagnéticos, al sol, etc.
                                       En todo caso, es un instrumento que deberían usar sólo los terapeutas.


           ESGUINCES, GOLPES Y TORCEDURAS
                   Una pirámide de un metro de base, con un peso de unos veinte kilos si es de madera y unos 5 a 7 Kgs. si es de
           aluminio, permitirá tratar estas accidentales disfunciones con su antipirámide, colocando la pirámide sobre una mesita y
           poniendo el pie dentro. También puede usarse la antipirámide, colocando el pie de modo que quede cerca del plano de la
           base, bajo la mesa de madera o construyendo un mueblecillo especial para tal fin. Si se usa la antipirámide, conviene
           repartir  el  tiempo  en  cuatro  sesiones  diarias  de  15  a  20  minutos  cada  una,  pero  es  recomendable  consultar  con  los
           médicos  de  Cuba  y  terapeutas  que  usan  pirámides.  Las  sesiones  de  terapia  dentro  de  una  pirámide  no  tienen  plazo.
           Mientras más tiempo, mejor.

                   La persona sentirá mayores o menores molestias, incomodidades y hasta dolor durante las primeras horas -o días-
           pero  eso  indica  que  está  habiendo  una  reacción  favorable.  De  todos  modos,  las  pirámides  de  alta  densidad  son
           recomendables para el uso por parte de médicos y terapeutas, que pueden controlar y comprobar las reacciones en los
           pacientes, en especial si tienen marcapasos o otros dispositivos similares. Conozco sólo una persona que lo tiene, pero
           duerme en una pirámide normal. Su permanencia en una más densa, de uso exclusivamente terapéutico, conviene que
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