Page 117 - 12 Kepler
P. 117

buena suma. Es más que probable que el anonimato no lo fuera
       tanto y que Kepler supiera a quién estaba pronosticando el fu-
       turo. El caso es que,  en opinión de Wallenstein, había acertado
       plenamente. El general, que consultaba con los astrólogos cada
       momento de su vida y cada batalla que acometía, decidió proteger
       a Kepler y mantenerlo a su disposición.
           W allenstein había recibido del emperador, como recompensa
       por sus triunfos, el ducado de Zagan (o Sagan), en Silesia (Polo-
       nia), a unos 160 lan al norte de Praga. El general no comulgaba
       con ningún credo religioso; era un hombre de acción a quien le
       importaba bien poco la teología. Y la luterana Zagan estaba dema-
       siado al norte, ignorante de las luchas religiosas que se estaban
       produciendo en el sur. Convenció al astrólogo y a las autoridades
       de Zagan,  ofreció al primero un buen salario y,  además, Kepler
       regiría su propia imprenta en la ciudad que le acogía. Así que allí
       fue la familia Kepler en 1628. Johannes recibía su salario con nor-
       malidad, por lo que no tenía queja en ese sentido.
           Pero Zagan no fue  el paraíso. La ciudad no tenía ambiente
       científico ni cultural y Kepler ni entendía su dialecto ni podía usar
       el latín. Pero lo peor fue que hasta allí también llegó la Contrarre-
       fom1a con las mismas exigencias que Kepler conocía bien de Graz,
       Linz y Praga.
           Dejemos transitoriamente de ocupamos de su vida y volva-
       mos a  su ciencia, analizando las consecuencias de sus teorías,
       especialmente en la astrofísica actual.




       LAS LEYES DE KEPLER EN  EL SISTEMA SOLAR

       Analicemos las consecuencias de las leyes de Kepler, tanto en la
       interpretación de fenómenos astronómicos clásicos como en as-
       trofísicos recientes, empezando por algunas curiosidades en el
       sistema solar. Todos los planetas tienen una órbita elíptica, como
       se refleja en la tabla siguiente, que muestra las excentricidades de
       las órbitas con respecto al Sol, salvo la de la Luna, calculada con
       respecto a la Tierra.






                                          REPERCUSIÓN  EN  LA CIENCIA ACTUAL   117
   112   113   114   115   116   117   118   119   120   121   122