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Camino a la Victoria

la familia, es una invitación a preferir, o sea dar prioridad a la relación con Dios y Dios es

amor, y entonces todas las relaciones personales tienen como fundamento el amor Mateo
10:37. Yo he visto muchas personas que oran por la evangelización del mundo, pero no
hacen nada cuando existe una gran necesidad entre los que viven cerca de ellas. Al vivir

una vida victoriosa, el cristiano debe siempre ser sensible a los asuntos de su familia, sus
amigos, sus colaboradores, tanto como de las necesidades de los millones que mueren de
hambre en las naciones comunistas.

Ahora, la transportación. ¿Cómo viajaremos en este viaje llamado vida y cómo llegaremos
al destino final? Por la presencia de Jesucristo. ¿Qué queremos decir con la «presencia de

Jesús»?

Uno. Significa que cada día debemos recordarnos a nosotros mismos que nuestro cuerpo
es el templo de Dios, que Dios mora en él, que es la «habitación de Dios». El poder y

sabiduría que se genera, por el simple y diario recordar esto, es tremendo.

Dos. Significa también que cada día debemos hacer y decir cosas como Jesús lo hubiera

hecho o dicho. La inspiración y serenidad, que este conocimiento producen, son
necesarias.

Tres. Significa además que debemos conocer este día a Jesús, un poco más que ayer. Este
continuo estudio de Jesús produce un enriquecimiento de vitaminas para tu crecimiento
espiritual.

Si tu dependes de tus talentos como tu vehículo para viajar, vas a terminar con
frustraciones. Yo sé de lo que estoy hablando. Yo ya he probado la amargura de esto. Si
descansas en tu propia determinación como tu modo de viajar, fracasarás miserablemente.

Te estoy diciendo esto porque mi vida, anteriormente, estuvo llena de fracasos debido a mi
confianza en mi propia determinación. Si tú eliges para transportarte, lo que otros dicen de

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