Page 60 - Cuentos para Triunfar

Fin segunda parte

En una conferencia, le pregunté a un asistente si me daría sus ojos
por un millón de dólares, a lo que respondió negativamente.
Me dirigí a otro y le ofrecí un millón por sus piernas y respondió de
igual modo.
Me dirigí a un tercero y le ofrecí la misma suma por sus manos y
sus brazos, a lo que contestó: "de ninguna manera".
El cuarto también se negó a venderme su cerebro por igual monto.
Entonces concluí: cuatro millones de dólares es un buen comienzo
para saber que cada uno de ustedes vale mucho más que eso. Sin
lugar a dudas que el valor de una persona no puede ser medido en
dinero, ni en ningún otro tipo de bienes.
Lo lamentable es poder ver todos los días, cómo la mayoría de las
personas que pasan por mi vista, no se valoran a sí mismas. No
asumen la responsabilidad de dirigir con excelencia su propia empresa
de vivir, que como dije antes vale más de cuatro millones de dólares.
A cuantas personas les gustaría tener una empresa de ese valor?.
Sin embargo no se dan cuenta de que ya la tienen.
Si Usted es la máxima expresión de la naturaleza; el ser humano
último modelo; un héroe de la historia de la humanidad, cuyo cerebro
es capaz de llevarlo hasta donde desee (si lo usa); si no es una oruga
procesional; si Usted vale mucho más que muchos millones; si no es
un pavo, sino un cóndor nacido para volar alto; si fue creado por el
Maestro de los Orfebres como la joya más preciada, entonces
compórtese como tal. Su vida, está en sus manos.
De ahora en adelante, deje de echarle la culpa a los demás;
levante el trasero y póngase en acción, que la vida se nos pasa, y
muchos esperan por su aporte;
"porque hay muchas estrellas varadas en las playas del
mundo..."