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Sesión 2
                   Secuencia didáctica 1
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                              El poder de una adicción


                                Actividad


        Visita www.esant.       Lee, responde las preguntas y realiza que se pide.
        mx/ecsecb1-08,
        donde encontrarás un       • Las drogas tienen un poder muy fuerte sobre el cerebro y alteran su funciona-
        interesante artículo      miento. ¿Cómo se comporta una persona que se encuentra bajo la influencia de
        sobre el cerebro
        adicto.                   alguna adicción? ¿Qué emociones predominan en ella? ¿Cómo es su vida social y
                                  afectiva?

                                   • Con la ayuda del profesor, comparte tus reflexiones con tus compañeros y detecten
                                  semejanzas y diferencias entre lo que comenten.



                              Cuando las personas consumen drogas, ocurren algunos efectos: la sobreestimulación del
                              sistema de gratificación produce euforia y motiva a las personas a consumir drogas repeti-
                              damente. El cerebro se ajusta a la elevada cantidad de dopamina (y de otros neurotransmi-
        dopamina. Mensajero   sores) produciendo menos dopamina o disminuyendo el número de receptores que pue-
        químico del cerebro   den recibir y transmitir señales.
        que regula el sueño,
        mejora la atención y   En una persona que abusa de drogas, la cantidad de dopamina sobre el sistema de grati-
        controla los impulsos,   ficación del cerebro se puede volver muy limitada, disminuyendo su habilidad para sentir
        la actividad motriz    placer. La persona necesita consumir drogas para lograr que la función de la dopamina
        y la motivación.
                              regrese a lo normal y requiere aumentar la cantidad de droga para crear la euforia de la
                              dopamina. Se considera que la mayoría de las drogas adictivas inciden en el sistema de re-
                              compensas natural que hay en el cerebro (en los circuitos relacionados con la satisfacción
                              por comida, música y sexo), es decir, lo engañan y nuestro cerebro nos hace sentir placer
                              de una manera muy intensa; sin embargo, al terminar los efectos el cuerpo pide más sus-
                              tancia para sentirse bien. Es un círculo que lleva a una adicción.


                              De manera natural, el cerebro produce mensajeros químicos llamados neurotransmisores,
                              sustancias que transmiten impulsos nerviosos en la sinapsis. Las drogas pueden alterar
                              las funciones cerebrales porque los compuestos activos que contienen son muy semejan-
                              tes a los neurotransmisores naturales, así que las neuronas los reciben y pueden producir
                              efectos como alterar la comunicación entre ellas o hacer que las neuronas liberen grandes
                              cantidades de neurotransmisores, específicamente de la dopamina.

                              También hay drogas depresoras del sistema nervioso central, que pueden disminuir la ac-
                              tividad cerebral. Entre ellas se encuentran algunos medicamentos que son utilizados para
                              inducir el sueño (somníferos), generar calma (sedantes) y aliviar o reducir el dolor (analgé-
                              sicos), pero también pueden causar este efecto la morfina, la heroína, la mariguana y el al-
                              cohol etílico, entre otras drogas.


                              Algunas drogas imitan a los neurotransmisores, pero no provocan las mismas reacciones.
                              Generalmente producen euforia, lo que incita al cuerpo a repetir una y otra vez el consu-
                              mo. Por lo general, la dopamina aumenta como respuesta a recompensas naturales, como
                              cuando se consumen alimentos, pero se incrementa de manera exagerada cuando se con-
                              sumen drogas como la cocaína (figura 1.20).


         Eje: Sistemas
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