Page 46 - Visiones de Alejandria | 3ra edicion | Editorial HL 2019
P. 46
Editorial HL | Literatura Moderna
Parte I | Así era el bardo
Como siempre, llegue listo para una noche de historias, y ya estaba ahí la sombra con
su manto cubierto de un aura purpura, la cual admito le venía muy bien por ser
Octubre, pero en fin, ahí estaba en el césped tirada de costado, mirando las estrellas,
con el manco a su lado de pie sobre una roca, esperando a todos los demás,
contemplando su veladora fijamente (casi como un cirio) flotante, en tono ámbar a
unos tres metros del suelo en señal de nuestro punto de reunión.
Y pues como decía, llegue y encendí mi pipa sonriéndole a la sombra que ya me
miraba de soslayo con cierto recelo porque sabía que ella no podía fumar (debido a su
forma etérea de esa noche), pero más que nada. Me miraba así debido a que esa
misma semana yo había dejado de usar (temporalmente) mi vieja túnica negra como la
que vestía ella; sustituyéndola por una gabardina muy a la moda que hasta la fecha
traigo puesta…
Entonces… yo fumaba en silencio y en eso sonaron los pasos de alguien más.
En el césped, pisadas de alguien que venía acompañado del cascabeleo exacto de una
botella grande con licor.
Y remoje mis labios…
Me imagine el cristal verde de la botella y al instante vi al bardo de la misma
acercándose, así todo flacucho y recio con su guitarra en la espalda, completamente
listo para una noche de historias.
El tenía su melena risada como cuando murió, incluyendo la barba café y sus ojos de
león con los que nos saludó a todos para luego recargarse sentado en un árbol a mi
46
