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Edición Especial Revista Arbitraje Alumni 43

Y es que el arbitraje se somete al principio de autonomía de la voluntad de las
partes, a someter su disputa al conocimiento de un árbitro, ahora, si ambas partes
desean el uso de tecnología (sistemas operativos, software, inteligencia
artificial), se podría disponer e incluso se podría variar, temas resueltos por
humanos por la percepción humanista y otras por la tecnología por su rapidez.

Sin embargo, actualmente, existen importantes obstáculos en pleno 2020, que
se deben superar para llegar a implementar de forma efectiva una inteligencia
artificial tales como “fundamentar sus decisiones” y “resguardo de
confidencialidad”.

A. Fundamentar decisiones

Los tiempos cambian, actualmente los seres humanos tenemos la capacidad de
poder fundamentar una decisión, de una forma jurídica, como es sabido por la
comunidad jurídica, toda decisión debe ser bien fundamentada, esta cualidad
única que tenemos los seres humanos, dejaría de ser única, si es que se
perfecciona la inteligencia artificial, ya que “los sistemas de Inteligencia
Artificial, no son capaces de explicar sus propias decisiones lógicamente y en
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un lenguaje comprensible para un humano promedio”.
Esto representa un problema fundamental que debe ser superado para hacer
posible el arbitraje automatizado con sede en un estado determinado, pues
frecuentemente se exige que los laudos estén debidamente razonados y
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fundamentados por escrito .

La explicación de la decisión es necesaria e imprescindible en la resolución de
un conflicto, sin la destreza, la inteligencia artificial arbitral iría contra un
debido proceso, resultando en la nulidad absoluta e inejecutabilidad de la
decisión.

La capacidad para superar este obstáculo podría esconderse detrás del desarrollo
y perfeccionamiento de la tecnología de IA llamada “automatización de

10 Ídem.
11 Ídem.