Page 195 - Resiliente
P. 195

La única cosa de notar es la creciente esperanza que hemos

                   amasado durante estas horas, que a pesar de ser pocas, han sido
                   cruciales en el ánimo de todos, Con orgullo, puedo decir que

                   eh intentado reivindicar mi relación con Camila, estamos más
                   unidos y hemos logrado pasar más ratos juntos, llenándonos

                   la cabeza de buenos pensamientos, cosa que pensé realmente
                   imposible en días anteriores...



                   Tuvimos un ataque el 31 de mayo, un H se metió por la barricada

                   cuando estábamos dando una ronda por la urbanización, era rápi-
                   do, uno reciente, sus movimientos eran realmente impresionantes,

                   de hecho pensamos haberlo visto brincar, sin embargo Mauro
                   y yo lo esperamos cerca de la esquina y mi amigo intercepto

                   al infectado con su improvisada hoz matándolo instantáneamente.



                   Le ensene la fosa donde los enterramos... y él me indico algo
                   doloroso, la fosa donde había colocado a su abuela.



                   Yo lo había leído en su bitácora, pero no había sabido ubicar-

                   la, estuvimos un rato hablando sobre lo que había pasado,
                   a resumidas cuentas, todo lo que había sucedido en el trans-

                   curso de las semanas anteriores, pero llegamos a la conclusión
                   de que preferíamos que estuvieran donde fuese que estuviesen

                   todos esos seres queridos a vivir la pesadilla para lo que
                   nosotros somos víctimas, nosotros somos presidiarios de este

                   mundo, estamos atrapados, quizás condenados... quizás nos lo
                   merecemos, por todo aquello que hemos hecho.



                   No sabría decir porque estamos aquí, pero estamos aquí y lo

                   único que podemos hacer es vivir el tiempo que tengamos y pro-
                   teger a quienes podamos proteger.



                   Cleo y Camila se han mostrado entusiastas al aprender a neu-

                   tralizar Zs... y no digo que nosotros fuésemos genios, pero
                   en realidad teníamos más experiencia que ellas, así que Máximo

                   y yo cuadramos en ponerlas a practicar golpes contra los
                   arboles cercanos, para fortalecer los músculos de los brazos




                                                                                                                      195
   190   191   192   193   194   195   196   197   198   199   200