Page 321 - LIBRO ERNESTO
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Capítulo 14



               de alguien que tenga nombre y experiencia en el fútbol y la decisión
               fue llamar a Ernesto.


               Desde el primer día de su trabajo en el panel de comentaristas deportivos,
               tuvimos a un hombre lleno de alegría, con una chispa especial,
               conocimientos, experiencia y un ánimo siempre positivo. Llegaba
               elegantemente vestido con terno y corbata, incluyendo pañuelo en el
               pecho. Faltaba tiempo para que exprese sus conocimientos e ideas del
               rey de los deportes, había que pedirle que “sintetice  el tema”, porque se
               iba de largo y el tiempo era corto.


               Compartí con Ernesto cientos de transmisiones a nivel nacional e inter-
               nacional. Siempre reconocí en él su gran sentido de compañerismo y so-
               lidaridad para hacer lo que se debía hacer en cada jornada informativa en
               las circunstancias que sean. Puntual, alegre, dicharachero, conocedor de
               infinidad de anécdotas en torno al fútbol y a sus protagonistas, personali-
               dades de  la política y el convivir nacional es un conversador espectacular.

               Sus historias espectaculares me ayudaron a incrementar mis cono-
               cimientos de periodista deportivo. Varias se generaron en los viajes
               que por más de un mes nos mantuvieron fuera de nuestro Ecuador.
               Recuerdo las cosas que pasamos en Paraguay, Colombia y Argentina
               cuando transmitimos desde esos países la Copa América o lo que vi-
               vimos en Alemania en el 2006, cuando acompañamos a la Tricolor en
               su segunda participación en un Torneo Mundial. Su dominio mínimo
               del inglés no era problema para hacerse entender lo que deseaba; claro
               recurriendo además al lenguaje universal de las señas.


               Así  lo conocí  y traté a este personaje, amante de la música nacional y
               del tango. En sus autos siempre lleva buena música y nosotros también
               la disfrutábamos con los comentarios de sus artistas preferidos.


               El comentario más largo que lo escuché  fue sobre la consecución del
               título de Campeón del fútbol Ecuatoriano logrado con El Nacional en
               la misma cancha de Barcelona en Guayaquil en 1992. La interrupción
               del tránsito para llegar al Estadio, la pintura fresca en el vestuario, la
               emergente adquisición de ventiladores portátiles para que los jugadores

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