Page 10 - El paraiso perdido
P. 10
1 i- Una obra clásica
El Paraíso Perdido de Milton es una obra clásica, es decir, una obra que
rezuma experiencia humana, emoción humana. ¿Qué experiencia, qué emo
ción?
Ante todo la experiencia de la tragedia: se vive sabiendo que se va a morir,
mientras que en un Paraíso, real o mítico -no importa- no había muerte.
Tal Paraíso lo hemos perdido precisamente porque lo añoramos. Milton
recoge la tradición bíblica que es una tradición de honda raigambre humana.
En el Paraíso que hemos perdido no había crímenes, no había guerras, no
había enfermedades, no había ambiciones. La naturaleza daba comida, cobijo,
alegría. El hombre y la mujer se amaban. Dios visitaba al hombre no para
pedirle cuentas sino para conversar con él. El cielo estrellado hablaba de Dios.
Los ángeles venían y hablaban de Dios. Y los animales servían al hombre.
Pero tal Paraíso se ha perdido. Aunque el hombre era libre, lo perdió
porque el odio había llegado antes que el hombre. Es una experiencia desespe
rante y Adán se desespera. No quiere haber nacido. No quiere haber salido de
la nada:
“Did I solicit thee
From darkness to promote me, or here place
In this delicious garden? As my will
Concurred not to my being. it were but right
And equal to reduce me to my dust...” (10. 744 y ss.)
“...How gladly would I mect
Mortality, my sentence and be earth
Insensible, how glad would lay me down
As in my mother’s lap? There I should rest...” (10. 775 y ss.)
Por su parte. Eva está dispuesta al suicidio:
“Let us seek death. or he not found. supply
With our own hands his office on ourselves...’' (10. 1001 y s.)