Page 180 - Mitos y cuentos egipcios de la época faraónica (ed. Gustave Lefebvre)
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LAS AVENTURAS DE HORUS Y SETH
tonces la Enéada dijo a Banebdedet, el gran dios vivo: «Un veredicto fue
(ya) emitido respecto a ellos en los tiempos primordiales en la gran sala
Unica de Justicia».
Thot escribe a Neith; respuesta de Neith
Después de eso, la Enéada dijo a Thot delante del Señor Universal:
«Elaborad pues una carta para Neith la poderosa, la madre divina, en
nombre del Señor Universal, el toro que reside en Heliópolis». Y Thot
dijo: «Con gusto, sí, con mucho gusto»29. Entonces se sentó para elabo
rar la carta, y dijo: «El rey del Alto y del Bajo Egipto, Ra /[2,10]-Atum, el
amado de Thot, el señor del doble país, el Heliopolitano, el Disco solar
que ilumina el doble país con su brillo, el Nilo poderoso que toma pose
sión (de las tierras), Ra-Harakhti (en tanto que30 Neith la poderosa, la ma
dre divina, que iluminó el primer rostro, está viva, en buena salud y siem
pre joven), el alma viva del Señor Universal, el toro en Heliópolis, en
calidad de rey perfecto de Ta-men’ 1.— Objeto de la carta32: Este humil
de servidor ha pasado la noche preocupado por Osiris, consultando (al
respecto) al Doble País cada día, en tanto que Sobek, (él), permanece es
table para siempre33. ¿Qué vamos a hacer con estos dos hombres que,
desde hace ochenta años hasta ahora, están delante del tribunal, /[3,1] sin
que se sepa cómo juzgarlos, a estos dos adversarios?34 Ordénanos pues
lo que debemos hacer».
Entonces Neith la poderosa, la madre divina, envió una carta a la
Enéada diciendo: «Entregad la función de Osiris a su hijo Horus, y no
cometáis estos grandes actos de iniquidad que no están en su lugar; de
otro modo, yo me irritaré y el cielo se aplastará contra el suelo. Y que se
le diga al Señor Universal, el toro que reside en Heliópolis: duplica los
-J Lit: «Actuaré, mira, actuaré (así)». La misma expresión 1. 11,2 y 12,1. Thot, el único dios
que sabe escribir, era, como lo llama Anastasi t7, 9, 2, «el escriba de la Enéada»: por ello se con
sideraba el patrón ν el modelo de los escribas.
30 Este paréntesis no tiene sin duda otro objetivo que expresar la destinataria de la carta,
cuyo nombre, en lugar de estar mencionado, como es habitual, en cabeza en el documento, se
intercala entre los numerosos títulos del remitente.
31 Ta-meri, una designación de Egipto. La misma expresión en 1. 16,1. [N. del T.: Significa
«Tierra Amada».]
32 Lit. «a saber» r ntt, fórmula introductoria del tema de una carta.
33 El autor de la carta constata que Sobek, por e! contrario, no provoca ninguna preocupa
ción a su madre. Sobek es hijo de Neith (cfr. nota 28).
•'4 Esta misma expresión (m p? s 2 «a saber, estos dos hombres») ya la habíamos en
contrado, p. 135, en Príncipe 7,13 (pasaje en parte reconstruido). Vuelve a aparecer muchas
veces en el transcurso de nuestro cuento: 1. 8,11; 11,3; 12,2; 13,4. En l. 11,3 debe traducir
se mejor por «los dos amigos», puesto que en este momento los dos hombres se reconci
lian.
33 Lit. «dobla a Seth en sus bienes». ·