Page 34 - Hijo, no te olvido
P. 34
te reíste mucho, y siempre que nos
acordábamos nos reíamos.
También jugábamos al memorice,
teníamos un memorice bíblico, y con el
tiempo tu conocías muy bien las
imágenes.
Por ese tiempo tú hablabas bastante bien,
excepto algunas palabras que no
pronunciabas muy bien como fificil
(difícil), fifafa (jirafa), ojo (rojo). La más
chistosa de todas era wewinos
(pingüinos). Estos después fueron
“pipinos” y finalmente pingüinos. Sin
embargo, lográbamos desarrollar
algunas pláticas muy interesantes, la
mayoría de las veces tenían que ver con
preguntas que tú me hacías. Muchos ¿Por
qué? Hijo, yo nunca me cansaba de tus
preguntas.
Por otro lado, jugábamos a las
escondidas. Esto era muy divertido. Ya
que siempre sabíamos dónde estaba
escondido el
otro, pero eso era lo divertido ya que
pasábamos cerca del que estaba
escondido hasta que ya no se aguantaba
la risa.
También tomábamos muchas fotos de las
cuales he incluido varias aquí.

