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300| En el Jardín de la Sabiduría Capítulo Nueve: El reencuentro | 293 forzado a admitir–que el Rey existe… transformaron en polvo. Entonces el Sabiondo vio –y se vio tierra seca. El pantano se esfumó y los espíritus malvados se hizo lo que hizo y entonces se encontraron a sí mismos en D
mientras que Abaie, que fue uno de los más grandes sabios adelante y avanzamos. ¡Pasado pisado! ¿Hemos transgredido? sesión de plegaria personal, que es la que nos ayuda a evitar
talmúdicos y director de la Yeshivá, recibía un “saludo” ¡Seguimos avanzando! ¡Simplemente hacemos teshuvá en salirnos de pista y sucumbir a emociones negativas.
del Cielo solamente una vez por semana. Abaie estaba muy nuestra sesión de plegaria personal y listo!
desilusionado por el hecho de que un médico se encontrara a
un nivel espiritual superior al de él. Entonces un eco Divino le No lo olviden: la introspección y la teshuvá por los hechos La pista de los ganadores
dijo que él no podía igualar los actos de Aba Omna. pasados nos lleva solamente una hora al día. Las veintitrés
horas restantes del día tenemos que ir con una enorme sonrisa Una vez que uno entiende la importancia de no descarrilarse,
¿Qué tenía tan de especial Aba Omna? Tenía habitaciones en el rostro. Una vez que hemos hecho teshuvá por algún ahora tiene que aprender a avanzar en forma efectiva,
separadas para hombres y para mujeres. Por aquellos días, tema, podemos borrarlo de la memoria y no volver a pensar manteniéndose en su propia pista. Esto no significa que el
la práctica de las sangrías era un componente esencial de la en eso nunca más. trayecto sea siempre liso y llano. Cada ruta tiene sus montañas
medicina. Aba Omna contaba con una vestimenta especial y sus valles, sus zonas rocosas y sus obstáculos naturales.
para las mujeres que cubría por completo el cuerpo excepto Siempre avanzamos. Nos concentramos en la tarea que Ningún tren garantiza un viaje cien por ciento tranquilo. Hay
por una pequeña apertura por medio de la cual introducía la tenemos en este momento y al mismo tiempo oramos por trenes que son atacados por ladrones. Incluso a veces sucede
aguja para extraer la sangre, de modo que no tenía necesidad el futuro. Nada es demasiado insignificante o demasiado que animales salvajes se interponen en el camino y obstruyen
de mirar a la paciente. Además, él jamás les pedía a los importante como para pedírselo a Hashem. la ruta. Lo mismo ocurre con nosotros. Parte de la Supervisión
pacientes que le pagaran sino que tenía una caja con dinero Divina consiste en todos aquellos impedimentos y desafíos
en un rincón discreto de la clínica. Aquellas personas que que se nos presentan a cada uno en su propia pista individual.
estaban en condiciones económicas de pagar introducían Seamos realistas
monedas en la ranura de la caja y aquellos cuyos medios no Hay mucha gente que tiene miedo de los altibajos de la vida.
se lo permitían no sentían vergüenza si no podían pagar. Si Hemos internalizado la lección de la pista del tren. Sabemos Pero al igual que las montañas y los valles de la pista del
el que venía a tratarse era un erudito de Torá, Aba Omna no que no debemos mirar a los costados ni tampoco hacia atrás. tren, estos también son inevitables. La emuná es la que nos
aceptaba el pago sino que le daba dinero al erudito para que Debemos movilizarnos siempre hacia adelante, de la mejor posibilita afrontar los desafíos y los cambios de la vida sin por
comprara alimentos sanos a fin de acelerar la curación. forma que podamos. Pero ¿qué sucede cuando, a pesar de eso “descarrilarnos” emocionalmente. Así como es necesario
todo, nos salen las cosas mal, y lo único que obtenemos de mantener en buen estado las pistas del tren, lo mismo
Cierta vez, Abaie envió a dos eruditos con el objetivo de todos nuestros esfuerzos es un zapato de tres puntas? Ahora ocurre con nuestra emuná. No sólo que debemos cuidarla y
examinar de cerca el accionar de Aba Omna. Aba Omna les es momento de armarnos de paciencia. El Simple, el pobre custodiarla sino que debemos fortalecerla constantemente.
ofreció hospedaje en su casa, les dio de comer y les preparó e inepto zapatero, no llegó a ser gobernador de la noche a
las camas con lujosas sábanas de seda. A la mañana, los dos la mañana. Él todo el tiempo sufría de pobreza y privación, La emuná es la que nos permite superar los malos rasgos
eruditos robaron las sábanas y las vendieron en el mercado. siendo objeto de burla y humillación por parte de todos los que de carácter y las pasiones físicas que nos acechan, de la
Luego se enfrentaron a Aba Omna y le preguntaron sin lo rodeaban pero a pesar de eso él siempre siguió avanzando misma manera que los baches y las obstrucciones acechan
rodeos: “¿Cuánto pagaste por estas sábanas? Queremos saber impertérrito, feliz con lo que le había tocado en la vida. al tren. Al purificarnos de las malas costumbres y las
más o menos a qué precio podemos venderlas”. Aba Omna emociones negativas, y en especial de la arrogancia y del
les dio un precio aproximado. Entonces los eruditos dijeron: No olvidemos que al principio del viaje el tren se mueve libertinaje, estaremos quitando los obstáculos de la pista
“¿Te parece que las podamos vender por más dinero?”. Aba lentamente. Pero si se mantiene en pista, poco a poco va de la vida, permitiéndonos así progresar a toda velocidad
Omna les dijo que ese era el precio que había pagado por ellas. tomando velocidad y finalmente casi vuela. El tren expreso y alcanzar la máxima seguridad y máxima eficiencia.
Entonces los eruditos le dijeron: “¿Acaso no son estas tus muchas veces tarda menos que un avión. El hecho de que Si logramos internalizar la metáfora del tren, podremos
sábanas? ¿Qué pensaste al ver que las habíamos tomado?”. continuamos haciendo a diario todo lo que tenemos que realmente avanzar en la vida. He aquí un ejemplo: supongamos
Aba Omna respondió: “Estaba seguro de que probablemente hacer –levantándonos a la mañana, lavándonos las manos, que hoy se nos presentó un problema: nos levantamos tarde.
necesitaban el dinero para liberar a algún preso y que tenían diciendo “Modé aní – Doy las gracias”, orando tres veces En vez de perseguirnos a nosotros mismos, miramos hacia
vergüenza de pedírmelo”.