Page 33 - Debate anti-utopico
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La izquierda desfigurada en los tiempos democráticos 33
las Américas, capaz de opacar, tarde o temprano, a los Estados Unidos.
Si bien para muchos esto puede parecer una exageración, la fuerza con
que chocaron las protestas de la gente común para oponerse al mundial
de fútbol, y la firme decisión del gobierno de Rousseff para priorizar las
inversiones futboleras por encima de cualquier política social de alivio a
la pobreza, no son otra cosa que el propósito de mantener a Brasil como
el país que está conquistando los mercados internacionales de América
Latina, Europa y Asia, aun cuando deba soportar un alto costo social.
Como nunca antes, la política exterior brasileña está supeditada a
las políticas de libre comercio que privilegian las redes de globalización
interdependiente, antes que la redistribución de la riqueza con un enfo-
que más humano. Todo esto pensando en que la gente de a pie pueda
sobrevivir como sea, luego de observar atónita cómo se encareció su nivel
de vida en más de 300 por ciento desde 1996. Rousseff es juzgada nega-
tivamente porque su gestión no redujo la alta inflación, tampoco subió
una tasa de crecimiento económico que no llega al uno por ciento anual
en el periodo 2014-2016, a lo cual se suman las acusaciones de corrup-
ción, convirtiendo a Brasil en un gigante de ambigüedades y desalientos.
La desigualdad apenas se redujo del 0,594 al 0,527 entre 2004 y 2014,
según el índice de Gini. En el modelo brasileño no pueden articularse
equilibradamente el crecimiento económico orientado hacia el mercado
mundial, la reducción de la desigualdad, la inflación que afecta el nivel
de vida de los más pobres, y la política social que siempre está some-
tida a las prioridades de la inversión extranjera directa y a las decisiones
macroeconómicas que benefician a los sectores más ricos.
Lo mismo sucede con las propuestas y el estilo de liderazgo alter-
nativo que brinda Aécio Neves, quien logró el segundo lugar en las
presidenciales del año 2014, pues el Partido de la Socialdemocracia Bra-
sileña (PSDB), que pisa fuerte en la política de los últimos veinte años,
no tiene otra prioridad que tomar el gobierno para proseguir con el
modelo de globalización exportadora y financiera. Además, representa