Page 12 - Comentarios_reales_1_Inca_Garcilaso_de_la_Vega
P. 12

Relación  de Juan  Coles  que  encontró  donde  un  impresor  de  Córdoba,  medio
         comida  "de  polilla  y  ratones".  Garcilaso  rehizo  su  historia,  la  dio  por  con-
         cluida  al  finaliza~  el  ario  de  1592;  pero  sólo  pudo  verla  impresa  trece  años
         después,  en  1605,  y  no  en Madrid  sino  en  Lisboa,  la  amena  capital  de  Por-
         tugal,  Reino no  sólo vecino  sino  incorporado entonces  a España  por Felipe  II.
              La  obra  apareció  con  el  título  expresivo  de  La  Florida  del  Y nea.  Obra
         que  pertenece,  dt:sde  luego,  fundamentalmente  a  la  historia,  basada  en  el
         relato  vivo  y  el  recuerdo  copioso  de  uno  de  los  protagonistas  de  la  brava
         jornada,  robustecida  con  la  confrontación  de  otras  fuentes  escritas,  La  Flo-
         rida  del  Y nea  tiene  también  mucho  de  labor  líteraria.  La  hay  no  solamente
         por  el  concepto  clásico  de  la  ejempL:iridad  y  del  fin  de  provecho,  por  la
         necesidad  de  salvar  del  olvido  hechos  y  personajes,  por  la  elocuencia  de
         arengas  y  discursos,  por  las  efigies  de  los  "claros  varones",  sino  porque,  sin
         desnaturaJiz¡¡r  lo  esenciRl  de  la  historia,  Garcilaso  anima  su  relato  con  ex-
         presivos  adornos  novelescos.
              Son  escenas  de  novela  bizantina  al  principio,  con  pérdidas,  encuentros,
         naufragios,  reconciliaciones,  desventuras.  Por  paisajes  insólitos,  por  entre
         arcabucos  y  pantanos,  bajo  los  rayos  de  un  sol  agobiante,  desfilan  los  bravos
         caballeros,  triunfadores  del  sueño  y  la  fatiga,  para  ganar  un  Reino,  dominar
         a  un  cacigur;- o  complacerse  en  la  arrogancia  de arrancarle  laureles  a la  gloria.
         En  otras  partes,  lo  que  se  manifiesta  es  el  gusto  de  las  narraciones  al  estilo
         de  las  novelas  italianas.  Por  las  aguas  tranquilas  navegan  canoas  y  bajeles,
         mientras  bate  las  velas  un  dulce  y  fresco  viento;  o  en  el  reposo  de las  luchas
         hay  escenas  <le  fiestas,  enaltecidas  por "la lindeza  de  la  gala".  Pero lo  que  da
         mayor  intriga  v  atracción  ¡¡{  relato  es  el  carácter  de  idealizaciones  v  aven-
         turas  que  en  éÍ  se  desenvuelve  como  en  los  libros  de  caballerías.  AIÍí  están
         los  ritos  del  combate,  las  promesas  del  señor  a  la  dama  (en  pleno  tremedal
         americano)  b  gallardía  de  los  mozos  (séilo  un  soldado,  Juan  Mateas  del  Al-
         mendral,  peina  car.as),  los  saludos  corteses,  las  descripciones  de  templos  y
         palacios,  las  "cosas  de  cnrnntamiento",  los  desafíos,  los  regalos.  Juan  de
         Añasco  y  sus  treinta  seguidores  parten  en  busca  de  la  Señora  Viuda;  Diego
         de  Guzmán  pierde  al  juego  a  la  hija  del  cacique  de  l\'aguate  y  luego  decide
         no  entregarla  y  se  fuga  con  ella  para  seguir  la  vida  de  los  ir.dios;  Pedro  de
         Atienza  enfer□a en  el  camino,  pete  no  quiere  desmontar  sino  fallecer  sobre
         d  ;aballo.
             De  este  modo  el  Inca  Garcilaso,  criado  "entre  armas  y  caballos  en  el
         Cuzco,  pero  forjado  en  el  estudio  en  sus  "rincones  de  soledad  y  pobreza"
         cordobeses,  alcanza  una  admirable  madurez  literaria.  Si  la  traducción  de  los
         Diálogos  de  Amor  había  sido  un  homenaje  al  espíritu  de  orden  y  armonía
         y  al  humanismo  del  Renacimiento,  la  composición  de  La  Florida  se  puede
         considerar  como  un  tributo  a  sus  lecturas  literarias  y  una  manera  de  adies-
         trarse  para  estar  pronto  a  más  altas  empresas.  En  su  largo  proceso  de  pre-
         paración,  acendrado  en  más  de  sesenta  años,  Garcilaso  neCesitaba  enseño-

                                         x,x
   7   8   9   10   11   12   13   14   15   16   17