Page 88 - Egipto TOMO 2

LA UNIVERSIDAD Y LA MEZQUITA DE EL-AZHAR 85
tas, en el punto central del Islam. Todos los dias puede verse en la Universidad de el—Azhar
á dos profesores pertenecientes á ritos diferentes, que apoyados en la misma columna
explican al par,
el uno al lado del otro, un mismo capítulo del derecho canónico, según las
concepciones diametralmente opuestas de su escuela.
Lo que para las ceremonias del culto musulmán son la Meca y Medina,
lo es para la
ciencia la mezquita de el—Azhar. A sus salas acuden muslimes de todos los puntos y de
todos lo» idiomas, no existiendo región alguna del Islam que no tenga en ella su repre-
islas del archipiélago indio.
sentante, desde las costas atlánticas de Marruecos, hasta las
De los siete mil seiscientos noventa
y cinco estudiantes que á ella concurrían en 1877, babia
mil doscientos cuarenta hanefitas 1
: tres mil ciento noventa y dos shafeitas; tres mil dos-
cientos cuarenta malekitas
y veinta y tres hanbalitas.
Ya &e comprende que la mezquita no podía dar cabida á tan numerosa concurrencia de
estudiantes, esta circunstancia obligó á habilitar otros muchos patios en otros templos
y
secinos de la academia de el—Azhar. Además de las fundaciones que dejamos mencionadas,
el sosten de estudiantes
y profesores se halla asegurado por medio de cuantiosos é importan-
tes donativos que proceden de las regiones de donde concurren estudiantes á la Universidad.
También se emplean en cumplir las propias atenciones los pingües legados debidos al
gran fundador de fuentes
y mezquitas, Abd er-Rahman Kikhja, fallecido hace ciento diez
y siete años, cuya tumba se encuentra en uno de los corredores laterales de la mezquita: y
por último, hace diez y ocho años, Rahib—bajá estableció el rionak el—Hanefy'eh, en el cual se
sostienen actualmente ciento treinta y cinco estudiantes. A este caritativo personaje se debe
también el que se aumentaran en quinientos los cuatro mil panes que diariamente se
distribuyen por el ministerio de las fundaciones. Finalmente, Abou Sultán bajá, antiguo
gobernador del alto Egipto, hace cocer diariamente doscientos panes que se distribuyen á los
escolares 2 .
Hase dicho repetidas veces que Mehemet-Alí se habia incautado, destinándolos al fisco
y consumiéndolos en provecho propio, de los capitales legados á la mezquita el-Azhar: nada
menos cierto que esto. Lo que hizo fué poner bajo la salvaguardia é inspección del gobierno
los bienes, uakp, universitarios, imponiéndose la obligación de cubrir con fondos procedentes
de su bolsillo particular el importante déficit que resultaba. El decidido reformador que se
esforzaba en poner al servicio de la idea gubernamental todos los factores de la vida
espiritual, jamás se detuvo ante la idea de pagar demasiado caro, merced á la onerosa carga
que se imponía, la influencia que tenia en los asuntos de la academia de el-Azhar, este
arrabal del antiguo espíritu; este mundo completamente distinto de todo
lo demás. La
situación continúa la misma. El gobierno del jetife administra la mezquita, invirtiendo sumas
1
El reducido número de hanefitas se explica por ser la más apartada del Cairo la provincia ó región que contiene más representantes
de esta secta, es decir, el Asia central. El Egipto shafeita, y las regiones malekitas del África septentrional, pueden enviar fácilmente s U s
hijos al Cairo. Actualmente enseñan en la mezquita de el-Azhar doscientos treinta y un profesores, de los cuales pertenecen al rito
hanefita cuarenta y nueve; ciento seis al rito shafeita; setenta y cinco al malekita, y uno solamente al hanbalita.
* Nos confesamos deudores de las noticias que preceden al doctor Goldziher, que las obtuvo del reformador del sistema escolar en
Egipto, Dor-bey, y al barón Fr. de Revay.
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