Page 9 - Palabras en libertad

que aguantar. De pronto, otra mesa se me cruzaba. En este caso había un libro que estaba

abierto y brillaba….

De repente, pudo visualizarse en un bosque hermoso, donde los pájaros con sus
cantos hacían florecer a toda planta, y en ese hermoso y gigantesco lugar vio una torre

que le llamó la atención, era muy alta, no tenía puerta de entrada ni escaleras. Sin

embargo, pudo escuchar voces. Él se escondió lo más rápido que pudo y vio a través de

la ventana largos cabellos rubios que pertenecían a su amada reina. Sin pensarlo se

dirigió hasta allí, a pesar de que se acordó que en cualquier momento estaría en camino
el rey. De repente se comenzaban a oír los galopes de un caballo que se aproximaba. -

¡CUIDADO SU MAJESTAD! Se oyó. El rey se asustó y posteriormente preguntó que

sucedía. (Quien sabe en qué historia puede llegar a parar…).

Cuando desperté, estaba sentado en una silla frente a una mesa y el libro cerrado.

Por curiosidad, lo quise abrir y allí me encontraba, como protagonista o antagonista de la

historia, todavía no lo entiendo pero creo que me gané el corazón de mi amada. Cuando
me dí cuenta, había sido una especie de sueño nuevamente. Yo en ese momento,

exaltado, ya muerto en pánico comencé a correr a ver si algún día llegaría a mi maldita

oficina y comencé a analizar todo. Qué relación existe entre: Oficina Nº8, Barcos en el

agua, Ajedrez, un cuento con un final alternativo y muchos espejos. No tiene sentido

me dije y seguí caminando hacia algún lugar creo…Esto me sirvió para razonar y
reflexionar mucho. Esta fue la primera vez que pude mirar hacia adelante y me vi,

atrapado en un espejo tratando de salir de cualquier manera. Las conclusiones estaban

hechas, estoy en un espejismo, algo que nunca va a terminar.

Zverev

(Luis Stefanelli – 2º Año – Mención)